Agrede a sus padres en Vigo porque no le regalan un teléfono móvil

A. Martínez VIGO / LA VOZ

VIGO

El joven, de 16 años, ya estuvo internado en un centro de menores hace dos años

08 ene 2016 . Actualizado a las 00:32 h.

Los Reyes Magos no le trajeron un móvil y por ese motivo la emprendió a golpes en su domicilio atemorizando a su madre y a su padrastro. La Policía Local de Vigo detuvo el miércoles a un adolescente de 16 años a quien le dio un fuerte ataque de agresividad al no conseguir lo que quería. La madre, que le explicó que no podían cumplir sus deseos al no tener recursos económicos suficientes para hacerlo, no consiguió calmar su ira. Un vecino del inmueble, situado en la céntrica calle Pi y Margal, dio la voz de alarma al escuchar unos golpes y gritos que iban en aumento y que alarmaron al resto de los residentes de esa zona viguesa.

Los hechos sucedieron poco antes de las cuatro y media de la tarde. Una patrulla enviada desde la central de información y mando se desplazó hasta el domicilio y en el portal les estaba esperando el autor de la llamada, que les indicó que no era la primera vez que sucedían este tipo de episodios de violencia dentro del domicilio de sus vecinos.

Los agentes se dirigieron al interior del edificio y, mientras subían las escaleras, escuchaban los gritos y fuertes golpes. La madre del adolescente les abrió la puerta y les invitó a pasar. Se dirigió a ellos entre sollozos y presa de un gran nerviosismo. En el lugar, los policías pudieron observar que había diversos enseres tirados por el suelo, así como varios cuadros que estaban rotos. Al mismo tiempo, un joven con el torso desnudo golpeaba con las manos una de las paredes sin parar de gritar y mostrándose muy alterado.

Miedo al chico

La mujer y madre del menor les comunicó que tenía miedo de su hijo y que, momentos antes había iniciado una fuerte discusión porque le exigía que le regalase un teléfono móvil. Le explicó a su hijo que la posibilidad de darle un smartphone representaba para ella un coste económico que se veía incapaz de asumir, dado que cuenta con unos ingresos muy bajos. El chico no lo entendió y comenzó a gritar y a amenazar tanto a ella como a su padrastro. Después comenzó a romper todos los objetos que encontró en la casa y les dio varios empujones.

La madre añadió que las discusiones con su hijo son frecuentes por cualquier motivo. El joven les exige constantemente que le entreguen dinero y en más de una ocasión llegó a agredir al resto de los miembros de la unidad familiar. Fruto de este comportamiento agresivo, el menor llegó a estar ingresado en un centro hace dos años. A la vista de estos hechos, los agentes procedieron a la detención del presunto agresor por un supuesto delito de violencia dentro del ámbito familiar. Los especialistas señalan que los jóvenes que maltratan a sus progenitores suelen haber recibido una educación autoritaria alternada con una conducta permisiva, por parte de progenitores sobreprotectores que no ejercen su autoridad y satisfacen sus caprichos.

Normalmente su rendimiento escolar es bajo. Las víctimas de los hijos maltratadores suelen ser madres y los agresores normalmente responden a un perfil de varones que sufren un gran conflicto interior. También es frecuente que provengan de familias que hayan atravesado episodios de violencia o de aquellas en las que el castigo físico haya sido considerado una práctica normal, que los chicos aprenden a asumirlo.