«La película no es un retrato amable de los cocineros»

Begoña Rodríguez Sotelino
begoña r. sotelino VIGO /LA VOZ

VIGO

Oscar Vázquez

El vigués Alberto Baamonde estrena hoy en el Festival de San Sebastián su ópera prima, «Cocinando en el fin del mundo»

24 sep 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

El realizador vigués Alberto Baamonde se viste hoy de etiqueta para el estreno, fuera de concurso, de su ópera prima en el certamen de cine con más caché del país, el Festival Internacional de San Sebastián. Cocinando en el fin del mundo es un documental de 90 minutos de duración que bucea en la gastronomía gallega junto a los chefs del Grupo Nove y es también la primera producción cinematográfica de la empresa viguesa Esmerarte. Recién aterrizado en Donostia, el director se muestra nervioso e ilusionado con la experiencia, ya que aunque tiene una amplia experiencia en el sector audiovisual, es su primer largometraje.

-La película es un largometraje documental, pero no es un documental al uso. ¿Qué particularidades tiene?

-Quizás lo más destacable es que no se trata de un reportaje. Hay personajes (aunque reales), hay secuencias y un guion muy trabajado. No es poner la cámara delante al cocinero y preguntarle sobre su trabajo. Es una producción de corte realista que muestra cómo es el día a día de los profesionales, pero desde que van por la mañana al mercado, o cuando van a visitar a un ganadero. Es un poco como un Gran Hermano en el sentido de que los protagonistas llega un momento que se olvidan de que las cámaras están ahí.

-¿Cómo se portaron los ?actores??

-Muy bien. Además hay que valorar que a muchos les pilló en medio de la crisis y eso también se refleja. El viaje por la cocina gallega, la nueva y la tradicional, no se maquilla. No es un retrato amable sino cercano y real, sobre lo que se cuece antes y después del plato.

-¿Cómo fue el proceso de grabación?

-Pues largo y complejo, porque comenzamos en el 2011 con un período de investigación de un año. Conseguimos una subvención del Agadic que nos permitió invertir en I+D y en preparar un guion muy elaborado.

-¿Cuántos cocineros del Grupo Nove estarán en el estreno?

-Pues en principio la invitación era para dos, pero se han apuntado algunos más. El estreno se enmarca dentro del ciclo Culinary Zinema, que tiene su propia esencia. Primero hay un pase del filme por la tarde y va seguido de una cena en el Basque Culinary Center, en la que cocinan los chefs del grupo. La gente tiene la oportunidad de ver la película y después saborearla, porque los platos que probarán después están relacionados con lo que se ve en la pantalla. Me hace mucha ilusión que nos haya invitado a estar en esa sección. El año pasado yo estaba en la sala como espectador disfrutando de las proyecciones.

-¿Qué perspectivas de distribución y difusión tiene el filme?

-Muy buenas, al menos en lo que respecta al mercado internacional, ya que de eso se encarga el propio Festival de San Sebastián y una agencia francesa nos va a vender el documental en todo el mundo. Donde tenemos que centrar los esfuerzos es en buscar la distribución para España. En principio es una pieza pensada para el cine, con una duración de 90 minutos, cuyo mercado principal serán los canales temáticos.

-Finalmente, ¿qué presupuesto se ha invertido en esta producción?

-Hacer la película ha costado 150.000 euros, a los que hay que sumar los gastos de promoción, que no son pocos.

alberto baamonde realizador