La tragedia sobre la colisión con el carguero «Baltic Breeze» se produjo de madrugada
01 abr 2015 . Actualizado a las 13:45 h.Era la madrugada en la que arrancaba abril y lo hacía de forma trágica en Vigo. Aún no amanecía cuando el carguero «Baltic Breeze» abordaba al pesquero «Mar de Marín» y se producía la peor tragedia marítima de las Rías Baixas en la última década. Doce meses después, quedan muchos interrogantes.
Lo único que está claro es el trágico saldo de la colisión, cinco marineros de los diez de la tripulación no regresaron a sus casas. Para Carlos Santos, Alejandro García, Hassan Boudra, M. Domínguez Mallo y Alexánder Nketia aquel fue el último viaje. Regresaban de faenar y se encontraban entonces a 1,4 millas al sureste del islote de Boeiro, al sur de Cíes. Tras chocar con el carguero el barco se hundió en cuestión de minutos.
Pese al brutal choque, que dejó marcas en el «Baltic Breeze» y acabó con el «Mar de Marín» hundido a 57, cinco marineros lograron salvar su vida. Francisco Javier Pazó, Juan Ramón Santiago Torres, Gumersindo Márquez, Gonzalo Santiago y Nicolás Mira se salvaron y pudieron regresar a tierra con sus familias.
Según los últimos informes periciales, la causa de la colisión, que se produjo a las 2.45 de la madrugada, podría estar vinculada a un problema con las luces del mercante. Así se desprende del escrito independiente elaborado por Gabriel de Llano Monelos y Vicente Beceiro Veiga, capitanes de la Marina Mercante y profesores del departamento de Ciencias de la Navegación de la Universidad de A Coruña.Según apuntan, el Baltic Breeze incumplió la sinstrucciones que obligan a todos los buques mayores de 20 metros «a situarse en el punto de recalada/notificación latitud 42°, 08 , 86 N, longitud 008°, 57, 00 W, por lo que no estaba correctamente arrumbado en ese punto obligatorio». Otro error al que apuntan es que el barco encendió las luces de maniobra y eso pudo interferir en la visibilidad de las de posición, las únicas que pueden estar visibles durante la navegación.
El carguero trasladaba vehículos al puerto de Vigo cuando se cruzó con el pesquero, que viajaba en dirección a la salida de la ría después de descargar las capturas.
El mercante «Baltic Breeze» es un buque cochero con bandera de Singapur que tiene 164 metros de eslora y acapacidad para 3.200 vehículos. El pesquero «Mar de Marín» era un arrastrero con base en Marín y 27 metros de eslora. La consignataria es la firma Bergé y Cía. Loiramar, empresa propietaria del buque siniestrado, reanudó su actividad el pasado mes de octubre pero sin los marineros supervivientes, que se enrolaron en otros barcos.