Se disparan las mujeres que congelan los óvulos para aplazar la maternidad

Ángel Paniagua Pérez
Ángel Paniagua VIGO / LA VOZ

VIGO

M. MORALEJO

La edad media de las señoras que lo hacen en el IVI es de 39 años

25 mar 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

Todos los indicadores demográficos alertan de que las gallegas son madres cada vez más tarde. Los avances técnicos permiten desde hace pocos años que las mujeres congelen sus óvulos para aplazar la decisión de tener hijos. La clínica que el Instituto Valenciano de Infertilidad (IVI) tiene en Vigo, el centro privado de Galicia con más actividad en reproducción asistida, congeló el año pasado óvulos de 63 señoras que prefirieron dejar para más adelante la decisión de ser madres por motivos sociales.

«La gente no tiene dinero, hay una inestabilidad laboral y profesional muy grande, y en algunos casos también hay inestabilidad personal, ya que hay muchas mujeres solas», explica el director de la clínica, el doctor Elkin Muñoz, que subraya que este fenómeno es posible porque existe una técnica potente que le da soporte. El médico dice que actualmente se pueden utilizar los óvulos congelados con una eficacia similar a los naturales. Asegura que la supervivencia de los embriones supera el 90 %.

«En América se hace mucho. En España el IVI congeló óvulos de 580 mujeres el año pasado. En Galicia se hace mucho menos», constata.

Pero es un fenómeno creciente. Solo en el IVI, por ejemplo, en el 2013 se registraron 42 casos y el año pasado 63, lo cual supone un aumento del 50 %.

En la sanidad pública solo las mujeres de menos de 40 años tienen acceso a tratamientos de fecundación in vitro. En el IVI tratan a señoras de hasta 50. Esto provoca que en la clínica privada la edad media de las pacientes sea superior, ya que las de menos años acuden a la pública. «No tiene lógica congelar los óvulos para el futuro por ejemplo a los 43», dice el director. No es que esté prohibido, es que la posibilidad de éxito es menor por una cuestión física y que la maternidad no se puede aplazar muchos más años.

Con todo, la media de edad de las mujeres que deciden congelar sus óvulos por motivos sociales es alta. El año pasado, las mujeres que vitrificaron sus óvulos en Vigo tenían una media de 39 años, con una desviación de dos años hacia arriba o hacia abajo. El año anterior había sido de 37,6 años, alta en cualquier caso.

Pero es que la edad media crece en general. «Hay una cantidad de mujeres de 45 a 50 años nada desdeñable», dice Elkin Muñoz. La edad media general, para todos los tratamientos, es de 39,6 años.

Normalmente se congelan ocho óvulos de cada mujer. Primero se estimula al ovario para que produzca. Para ello, la usuaria se administra una medicación durante unos diez días. «Es un tratamiento seguro», dice Muñoz. Al cabo de ese tiempo, se extraen los óvulos que ha producido. Se hace a través de la vagina, con una sedación, de manera que la intervención es ambulatoria y rápida. Cuando no se consiguen ocho óvulos, se suele repetir el proceso hasta tenerlos. Después se congelan y quedan pendientes hasta que la mujer decida someterse a un proceso de fecundación in vitro.