La Asociación de Amizade con Israel tiene 300 socios en toda Galicia
27 ene 2015 . Actualizado a las 04:48 h.El día de la entrevista la copiosa lluvia invita a refugiarse junto a la chimenea. Pedro Gómez Valadés está normalmente durmiendo a primera hora de la mañana porque trabaja de noche como recepcionista de hotel. Pero hoy ha tenido descanso y afronta la jornada aún sobrecogido por los últimos acontecimientos de Francia, no en vano es el presidente de la Asociación Galega de Amizade con Israel, lo que le costó en su día la expulsión del BNG. Valadés nació en 1961 en Teis en la popular zona de Wichita, pero su familia se mudó enseguida a la plaza de España. Estudió en el colegio de los Maristas en la calle Venezuela y al acabar comenzó a trabajar como recepcionista en el hotel México. Allí sigue después de 34 años atendiendo solícito a los clientes a cualquier hora de la noche. Su interés por la política empezó siendo muy joven. Fue militante de Esquerda Galega, el partido fundado por Camilo Nogueira, y luego ingresó en el BNG donde militó durante 16 años hasta que fue expulsado en 2008. La expulsión de la organización le valió la solidaridad política de otras personas afines al soberanismo que no compartieron aquella decisión. Así nació su relación de amistad con Pilar Rahola. Es socia de honor de la Asociación de Amizade de Galicia con Israel que preside Valadés y que cuenta con trescientos socios. «A política é como os granos, canto máis preto os miras, máis grandes son», señala Valadés, que quedó «quemadísimo» durante años aunque últimamente ha retomado el interés por la cosa pública, siempre desde una óptica galleguista. Señala que preside la Asociación de Amizade con Israel «non por motivos relixiosos senón por interese histórico e cultural e por solidaridade cun pobo que as pasou canutas». La asociación realiza numerosas actividades y actualmente está organizando un ciclo sobre cine y holocausto que se celebrará en el hotel en el que trabaja. Antes desarrollaban actos en Sargadelos o en Casa del Libro pero «recibiron presions». Ha visitado Auswichtz. «É espeluznante», señala sobre este campo de concentración de cuya liberación se cumplen ahora 70 años, con diversos actos en ciudades y municipios, entre ellos Moaña. Desde la asociación ha organizado quince viajes turísticos a Israel que están abiertos a todo el que quiera apuntarse y normalmente se realizan en noviembre. Relata que en el Estado judío «todo está cheo de búnkeres». Las casas disponen de ellos y también se encuentran en las paradas de autobuses. Cuando suenen las alarmas todo el mundo corre a refugiarse. Forma parte de su vida habitual. Israel ha creado un escudo antimisiles y eso evita que no impacten tantos proyectiles sobre la población civil. Cuenta que estuvo de visita y paseando por la ciudad de Sderot. «Caeron enriba tres misiles. afortunadamente non nos pasou nada e non hubo feridos». A su juicio «a reacción contra Israel non é normal. Son guerras. Todos os conflitos foron iniciados por Hamás», sostiene. CIUDADANOS EN SU RINCÓN pedro gómez valadés presidente de la asociación de amizade con israel