Una madre y su hijo dijeron al letrado que iban a aplicarle la ley gitana y ella lo acorraló durante una protesta contra las tasas
22 ene 2015 . Actualizado a las 05:00 h.Dos familiares fueron condenados ayer por amenazar de muerte a su abogado, acosarlo con llamadas telefónicas y en los juzgados, y advertirle de que le iban a aplicarle la ley gitana. La madre y un hijo aceptaron ayer seis meses de cárcel así como dos años y medio de alejamiento del letrado. Otro hermano que estaba imputado fue absuelto.
La vista por conformidad se celebró ayer en el penal número 2 de Vigo y asistieron numerosos juristas como testigos o en defensa de los acusados. El denunciante fue representado por su compañero de bufete. La Fiscalía dijo que los implicados, que eran clientes del perjudicado, tenían «el ánimo de atentar contra la tranquilidad y sosiego del letrado».
Los hechos se remontan al 19 de septiembre del 2012. La familia había requerido los servicios del bufete por un accidente en el que se vio implicado uno de los hijos. La madre V.B.B. y su hijo A.G.B. entraron en el despacho profesional del perjudicado y le increparon sobre el asunto que había llevado con el otro hermano, que había sido su cliente. Al parecer, le pedían unos documentos del pleito para reclamar un seguro de tráfico. Las explicaciones del letrado no les convencieron y lo amenazaron con que un clan gitano lo mataría. Añadieron que uno de sus amigos, famoso por haber acuchillado a más gente, podría matarle.
El abogado, atemorizado, interpuso una denuncia pero, a partir de esa fecha, los ahora condenados le llamaban por teléfono y le decían que iban a darle una paliza o matarlo, no solo a él sino también a su familia.
Nueve días después, el 28 de septiembre al mediodía, la madre se encontró por casualidad en los juzgados con el letrado, se abalanzó sobre él a gritos e insultos y le volvió a decir que su clan le iba a aplicar la ley gitana y que lo matarían. Un cuarto de hora después, la misma mujer se topó otra vez con el profesional cuando estaba concentrado con otros colegas a las puertas de los juzgados. Los abogados protestaban contra el proyecto del ministro Alberto Ruíz Gallardón para imponer las tasas judiciales, y la mujer profirió a gritos nuevas amenazas de muerte tras arrinconar al jurista entre la multitud.
A la salida del bufete
En los días siguientes, continuaron las llamadas. La tensión subió el 4 de octubre, cuando la mujer volvió a llamar al bufete del perjudicado, habló con la secretaria y le advirtió que su hijo seguía a diario los pasos del letrado. Cuatro días después, el abogado salió de su despacho y comprobó que uno de los hijos estaba situado a escasos metros, dentro de un coche. El profesional supo que el joven le esperaba porque, al pasar por la acera, se encaró con él desde el vehículo.
El letrado se sintió aterrorizado, y ante el temor de que el joven cometiese alguna acción violenta, pidió un taxi. Temía que si se subía a su moto, como hacía habitualmente, lo siguiese e intentase algo. El 9 de octubre amplió la denuncia inicial.
La Fiscalía pedía inicialmente un año de cárcel por un delito de amenazas del artículo 169.2 del Código Penal y que la familia lo indemnizase con 1.000 euros. El pacto por conformidad se cerró ayer a las puertas del juzgado y se rebajaron las penas.