La comarca de Vigo se convierte en Nueva York en el rodaje de un filme sobre la Garbo

Olhares de perfil. O mito de Greta Garbo, es la obra más representativa de Roberto Cordovani. La estrenó en el Teatro García Barbón en 1987 y dos años más tarde la llevó a Londres, donde recibió un premio por su labor actoral. Desde entonces ha sido su creación fetiche. Nunca le ha abandonado a lo largo de una extensa carrera centrada en el teatro en la que en numerosas ocasiones la vuelto a incluirla en su repertorio.

Pero el actor brasileño lleva desde entonces persiguiendo el sueño de llevarla al cine. Lo intentó en numerosas ocasiones y el proyecto siempre acabó fracasando. Prácticamente ya había tirado la toalla al respecto cuando el año pasado consiguió el apoyo de una productora de Brasil. Raphael Amorim y Andrea Costakazawa son los responsables de la empresa Arsa Crastinum, radicada en São Paulo, que también es la ciudad de origen del actor que estuvo año y medio en su país girando por varias ciudades con su compañía, Arte Livre.

«Dar con ellos ha sido providencial», asegura añadiendo que se trata de un proyecto artesanal, pero muy serio y profesional. El equipo cuenta con tecnología de última generación para abordar una producción sofisticada que se graba en digital y en blanco y negro. «Es un proyecto independiente en el que funcionamos como una cooperativa gracias a patrocinios y colaboraciones y sin cobrar un euro por nuestro trabajo, ya que tal como funciona el sector es la única manera viable de hacer cine si no estas dentro de una industria tal jerarquizada», opina.

Primer papel en cine

Al fin, Roberto Cordovani, curtido en mil personajes, pero siempre sobre las tablas de un escenario, tiene su primer papel en la pantalla grande. Y además, con su estrella favorita.

El rodaje que dirige Amorim contando como directora de fotografía a Costakazawa, comenzó a mediados de diciembre en Ourense y continúa en Mondariz Balneario y Tui, además de otras localizaciones de la comarca viguesa. «Se trata de un filme de época y en ello radica una de las mayores dificultades. Además la historia está ambientada en su mayor parte en Nueva York, por lo que las localizaciones deben parecer la ciudad norteamericana en los años 40».

Así, por ejemplo, han contado con la colaboración del Balneario de Mondariz para todas las escenas de interior y del restaurante Rivero. El Gran Hotel San Martín de Ourense también cedió sus instalaciones pare el rodaje, que también transcurrió por varias calles de la ciudad termal. Ahora ya están en la comarca viguesa, donde seguirán hasta que finalice el proyecto, a finales de marzo. Además de ser el protagonista y de ocuparse de la producción ejecutiva, Cordovani adaptó el guion teatral para el cine junto a Alejandra Guiberti. La pieza aborda el lado más oscuro de Grata Garbo y el misterio que rodeaba a la diva sueca. El actor, especialista en abordar papeles femeninos, se mete en la piel de la gran estrella del cine junto a un elenco integrado por cerca de 30 personas y seis personajes principales, entre los que se encuentra su compañero Bruno Portela, brasileño como él, junto a otros actores gallegos.

Tramos del filme se graban en portugués y otros en gallego. «El idioma, -advierte Cordovani- es una pieza fundamental de este proyecto que forma parte de algo por lo que he apostado desde que decidí instalarme aquí, ya que el principio básico que me movió siempre fue derribar barreras y acercar nuestras culturas, que son tan próximas». De todas formas, una vez que el rodaje de Olhares de perfil finalice, se subtitulará en gallego. Después comenzarán las negociaciones que prevén llevar a cabo con diferentes cadenas de televisión, tanto aquí como en Brasil, y su inscripción en festivales internacionales de cine.

Cordovani lleva afincado en Galicia más de 30 años y ya se considera un gallego más. Por eso apuesta por un estreno a todo trapo, en plan hollywoodiense, con una gran fiesta en el Balneario de Mondariz, ya que además es hace años vecina de la villa. Su teatro en Vigo continúa cerrado, pero no abandona la idea de volver a abrirlo tras repensar cómo reactivarlo. En todo caso, será después de que acabe el gran proyecto en el que actualmente está inmerso, aunque hará una parada para continuar con su compañía. El 20 y 21 de enero representará en el Teatro Principal de Santiago la obra Anna Sullivan.

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