La agente fallecida al atracador antes de ser tiroteada: «Cálmate, no pasa nada»

Alejandro Martinez / E. Vázquez Pita VIGO

VIGO

Un millar de policías y autoridades, así como numerosos ciudadanos vigueses, despidieron a la agente en la capilla ardiente. El subinspector herido tiene un pulmón muy dañado y está en coma inducido. Agentes especializados reconstruyen el atraco y recaban datos en la sucursal

29 nov 2014 . Actualizado a las 22:43 h.

Vanessa Lage, de 36 años, la agente que murió tras ser abatida a tiros por el atracador de una sucursal bancaria en Vigo, el también fallecido Enrique Lago Fariñas, alias el escayolista, dijo ayer a este asaltante antes de ser tiroteada: «Cálmate, tranquilo, no pasa nada».

Según han relatado sus compañeros de comisaría, una patrulla llegó en coche al banco y el atracador los vio y salió con la rehén. Justo en ese momento, llegaron a pie Vanessa Lage y su compañero Vicente Allo al banco. De repente, el asaltante se giró y se topó por sorpresa de frente con los policías. La policía fallecida le dijo: «Tranquilo, cálmate, no pasa nada» cuando el hombre lo apuntó y ya no le dio tiempo a decir más. Al parecer, los otros agentes abatieron al atracador. Los compañeros que se han acercado a la capilla ardiente, instalada en la Comisaría de Vigo, se han mostrado consternados ante el trágico desenlace de esta mujer con un carácter «muy calmado» y «grandes dotes para las labores de mediación». Su pareja sentimental, Roberto Moral, perteneciente al cuerpo, se encuentra «destrozado» por el trágico fallecimiento de Vanessa Lage, que tiene cuatro hermanos y cuyo funeral se celebrará mañana en la iglesia parroquial de San Breixo de Parga (Guitiriz-Lugo) un cuarto de hora antes de las dos de la tarde.

Un pulmón «muy dañado» y en coma inducido

Por su parte, Vicente A.B., de 41 años, el subinspector que resultó herido ayer en el tiroteo, presenta «lesiones muy graves» y un pulmón «muy dañado», por lo que se encuentra en coma inducido. Así lo ha comunicado esta tarde la Policía Nacional, que ha explicado que, aunque durante las primeras horas su estado era crítico, en estos momentos el agente está entubado, sedado y se encuentra estable dentro de la gravedad.

Las mismas fuentes han indicado que el agente tiene una constitución física y un estado de ánimo «muy fuerte», por lo que tienen «esperanzas» de que salga adelante «con las mínimas secuelas posibles».

La empleada de la sucursal bancaria de Vigo que resultó herida ya está en planta, tras ser operada para extraerle una bala del brazo. Según explicó un portavoz de Abanca, la operación «salió bien» y que está «animada», dentro de lo que cabe. «Esperamos su pronta recuperación», ha añadido la empresa.

Centenares de policías y autoridades

A lo largo de toda la jornada han presentado sus condolencias en la capilla ardiente un millar de policías nacionales, locales, autonómicos y guardias civiles, así como sus esposas. Acudieron representantes de la Fiscalía, la judicatura, altos mandos policiales de A Coruña y Madrid, el alcalde de Vigo, los sindicatos e incluso una asociación de la policía federal de México. Los agentes no podían ocultar sus lágrimas, como las compañeras de la agente y la asociación de mujeres policía. El novio de la víctima estuvo acompañando al féretro asistido por amigos y compañeros. También estuvieron el secretario de Estado de Seguridad del Ministerio de Interior, Francisco Martínez y el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijoo.

Uno de los presentes fue Francisco Javier Ramilo, excompañero de la unidad y amigo de Vanessa Lage. Emocionado recordó que la fallecida «era la peque del grupo». El agente, que visitó la capilla ardiente en compañía de su esposa, compartió cinco años de experiencias con la agente fallecida en Vigo y la ayudó a integrarse en el grupo policial hasta que él ascendió hace un año a oficial. El matrimonio tenía gran amistad con la fallecida y su novio, con los que salían en pandilla y tenían la misma afición por las motos. Visiblemente emocionados, recordaron a la fallecida como una mujer «muy alegre y dialogante que vivía el uniforme y que primero hablaba para resolver un problema y luego sabía sacar su genio si hacía falta».

Muchos ciudadanos vigueses en la capilla ardiente

Ya por la tarde numerosos ciudadanos vigueses acudieron a dar el último adiós a la policía fallecida. «Esta policía hacia un servicio a la ciudad y ha sido una desgracia», dijo un visitante. «Fue una pena, una chica joven, lamentó lo sucedido, ella cumplía con su deber pero ha sido una desgracia», dijo un visitante. «Una pobre niña, ¿qué mal le hacían a ella? Pobriña», dijo.

Reconstrucción

La Policía Nacional mantiene abierta la investigación sobre el atraco que se saldó con la trágica muerte de una agente de la comisaría de Vigo y del delincuente en un tiroteo.

Agentes de la Policía Judicial llevaron a cabo un registro en la vivienda de Enrique Lago Fariñas, el Escayolista, atracador fallecido a tiros ayer por la tarde después de acabar con la vida de una agente. Poco antes de las tres de la tarde, los investigadores han salido de la vivienda con dos cajas portando algunas pertenencias del fallecido. La vivienda está ubicada en el barrio de Becerreira, junto al colegio de Santa Marina, en Cabral.

Además, una brigada especializada en la recogida de pruebas se ha trasladado esta mañana desde Madrid hasta la sede de la sucursal bancaria donde se produjo el asalto. El objetivo es recabar datos para obtener una descripción detallada de cómo sucedieron los hechos. Agentes de la policía han cortado la calle a las once en punto de la mañana. La zona ha quedado acordonada en un tramo de 50 metros, impidiéndose el paso tanto a vehículos como a peatones.

El Ministerio del Interior ha informado de que la agente fallecida, Vanesa Lage, recibirá la máxima condecoración del cuerpo, la Medalla de Oro al Mérito Policial.