La viguesa Inés Abril se salva en Top Chef contra todo pronóstico con un mojito comestible

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En una prueba final en la que se enfrentaba a Fran, cautivó a Chicote y al resto del jurado

28 oct 2014 . Actualizado a las 12:36 h.

«¿De donte te has sacado este plato?». Así de descolocado se quedó Alberto Chicote ante el mojito comestible que salvó a la viguesa Inés Abril y le permitió quedarse una semana más en el programa de Top Chef. Pese a que los espectadores ya se habían acostumbrado a que la gallega sufriera contratiempos y errores en programas anteriores, esta vez la chef deslumbró.

El enfrentamiento era crucial, el primer duelo entre dos cocineros del programa que terminaría con uno recogiendo sus cuchillos. Al otro lado de los fogones Fran, que se ha ido ganando prestigio plato a plato y que ya se llevó la inmunidad en otras ocasiones. Inés, la última mujer de entre las concursantes, se enfrentaba a la presión de ser tan solo su segunda prueba de eliminación y de que todas las quinielas se jugaban en su contra.

Pero entró segura en la cocina para dejar el «pabellón bien alto» y demostrar sus ocho años de experiencia y lo logró. Con la idea de hacer un duelo a la altura se esmeró al máximo y la concentración que otras veces le fallaba en esta fue su gran baza. Con el objetivo de realizar un plato comestible de un mojito, la viguesa realizó un bizcocho de lima, una gelatina de ron, azucar y un sifón de hierbabuena. Una mezcla que hizo que Chicote se estremeciera y viajara a la playa. Fran, que tenía que hacer lo mismo con un bloody mary, no tuvo tanta suerte y el picante le hizo perder la prueba.

Otros platos sin éxito

La salvación de Inés Abril sorprendió a sus propios compañeros, que aseguraban que la apuestas estaban en cinco contra uno, pese a las buenas relaciones que todos tienen con ella. No es de extrañar esa situación, sobre todo por el programa que había hecho la gallega.

En la pelea por la inmunidad, que se llevó David, presentó un plato que no estaba bien terminado aunque tenía buen sabor. La receta con huevo no conquistó y dejó claro que la presión y el tiempo le pueden en ocasiones a la cocinera del restaurante Maruja Limón.

En la segunda parte del programa, los participantes de Top Chef tenían que valerse de latas para conquistar a sus contrincantes. Pese a la benevolencia en las críticas de sus compañeros, la propia Inés reconocía que su plato era el peor y que no estaba contenta con él. Aunque todas las miradas apuntaban a Mark para la prueba de eliminación, finalmente le tocó a ella dado que el voto de su amigo David valía el doble.

La viguesa se queda de este modo entre los seis finalistas que pelean ahora por continuar hasta el último programa. Y adelanta que aún hay mucha Inés por descubrir en las cocinas.