Por la tarde y en la misma mesa cenó Francisco Rivera, su mujer y unos amigos

La Voz

VIGO

El torero firmó numerosos autógrafos a sus admiradores

13 oct 2014 . Actualizado a las 05:00 h.

Los propietarios del restaurante La Espuela de A Pedra no se habían repuesto aún de la impresión de ver a mediodía a Stephen Hawking en una de sus mesas, cuando sobre las siete de la tarde se encontraron con otra sorpresa.

«Vino Francisco Rivera Ordóñez con su mujer y otras personas y se sentaron en la misma mesa que había estado Hawking a mediodía. Cuando se lo dije quedaron sorprendidos y les hizo ilusión», comenta el gerente, Víctor Cuña.

El famoso torero y las personas que lo acompañaban degustaron un variado de marisco a base de ostras, berberechos y gambas, entre otras piezas, y abandonaron el lugar en torno a las 21.00 horas. «Parecían un poco agobiados porque había mucha gente alrededor que quería hacerse fotos con ellos. Cuando ya estaban comiendo dijeron que no, para descansar. También Con Hawkins se le dijo a la gente que lo dejaran tranquilo mientras comía, es lógico», justifica el responsable del restaurante.

En total, eran cinco personas las que acompañaban a Rivera, a las que se sumó posteriormente otro señor que los conocía y que los encontró por casualidad. «Daba la impresión de que era un viaje de negocios y que uno de los que estaban podía ser un apoderado, añade Víctor Cuña, orgulloso de tener un día tan importante para sus fogones, algo que, asegura, no olvidará.