Funcionarios de 14 concellos analizan el bus metropolitano

J. Fuentes VIGO

VIGO

Los técnicos buscan una posición común a la espera de que Consellería y Concello de Vigo lleguen a un pacto para crearlo

14 oct 2014 . Actualizado a las 05:00 h.

Secretarios e interventores de los 14 concellos del área de Vigo se reunieron en la mañana de ayer en el museo Marco para analizar el proyecto de la Xunta para implantar el transporte metropolitano, un proyecto que camina con años de retraso ante la falta de acuerdo con el alcalde de Vigo. En esta reunión los funcionarios trataron de encontrar una posición común desde el punto de vista jurídico y económico, especialmente tras los cambios que ha introducido la modificación de la ley de bases de régimen local.

El encuentro se llevó a cabo de manera ajena a las negociaciones políticas de la Xunta con los concellos. Su única finalidad es técnica, con la intención de que si el proyecto avanza no se vea luego frenado en alguno de los ayuntamientos. Llegado el caso, todos tendrán que llevar el tema a aprobación de sus respectivos plenos previo informe de secretarios e interventores. En la reunión de ayer no se llegó a ningún acuerdo, a la espera de un nuevo encuentro con el tema más debatido.

En la esfera política, mientras tanto, la creación del autobús metropolitano está paralizada hasta que el Concello vigués y la Xunta lleguen a un acuerdo. Fuentes autonómicas han confirmado que previsiblemente no habrá novedades hasta principios de noviembre, cuando la conselleira, Ethel Vázquez, se reincorpore tras su baja por maternidad.

Aunque el conselleiro Alfonso Rueda se ha hecho cargo de la firma de su departamento, se da por sentado que será Vázquez, y por supuesto Caballero, los que tendrán que desbloquear el desacuerdo económico que persiste.

Tope discutido

Una vez que el alcalde vigués ha dicho que apoya el bus metropolitano, lo que lo separa de la Consellería es el dinero que va a aportar el Concello. Los estudios elaborados por la Xunta cifran en unos 250.000 euros la aportación municipal, cantidad con la que Caballero está de acuerdo. El matiz que los enfrenta es que el regidor exige que figure un tope de 260.000 euros como máximo para garantizar que no tendrá que aportar más fondos.

Desde la Consellería se rechaza esta demanda por dos motivos. Uno, que el sistema funciona desde hace años sin dicho límite y sin problemas en A Coruña, Ferrol, Santiago y Lugo, y se espera que pronto en Ourense, por lo que en la última ciudad no se pueden hacer excepciones sin poner en riesgo el sistema. Al margen queda Pontevedra, donde no hay transporte urbano y por tanto tampoco lo habrá metropolitano.

De otra parte, dejan claro que si finalmente existe una desviación debido a un mayor número de viajeros, la Xunta siempre se hará cargo del 80 % del coste ya que los concellos solo pagan el 20 % restante. En otras palabras, que si tiene éxito y hay más viajeros, el grueso del gasto seguirá del lado autonómico.

A la espera de un final, en la Xunta ya está la carta del alcalde vigués exigiendo que se ponga el tope para dar su visto bueno al convenio y poner en marcha el proceso. Medio Ambiente previsiblemente no responderá hasta noviembre y hasta que eso ocurra todo seguirá parado. Y solo se reactivará si finalmente se logra un consenso, algo imposible en los últimos años.