La gestora del auditorio achaca al Concello la crisis económica de la instalación

vigo / la voz

VIGO

La empresa concesionaria tuvo más de 2 millones de euros de pérdidas en el 2013

06 jun 2014 . Actualizado a las 07:00 h.

La empresa concesionaria del auditorio de Beiramar reunió ayer al consejo de administración de Pazo de Congresos para explicar, en presencia de representantes de todos los grupos municipales, la difícil situación de la sociedad. En el transcurso de la reunión, a la que el gobierno municipal acudió con varios asesores, se dio cuenta de unas pérdidas de 2,3 millones de euros durante el año pasado y de las malas perspectivas para el futuro.

La presencia de cuatro concejales (uno de por cada grupo más Carlos Font en nombre del alcalde) permitió a todos ellos conocer de primera mano las dificultades que atraviesa un complejo llamado a actuar como revitalizador de las actividades culturales y congresuales en la ciudad y que no consigue despegar. El motivo es fundamentalmente económico, ante la escasez de ingresos para hacer frente a los aproximadamente 52 millones de euros que aportó la concesionaria para su construcción.

Anuncios sin base

En la reunión se constató que la totalidad de los espacios y oficinas destinados a alquiler están vacíos y que han desaparecido los congresos de la programación. Por lo demás, las actuaciones y espectáculos ni mucho menos cubren los gastos.

También hubo críticas nada veladas ante los anuncios del alcalde de que se van a ocupar espacios, que luego nunca se concretan, según han confirmado fuentes próximas al encuentro. Esto se ha producido en varias ocasiones, como cuando todavía estaba en obras y Caballero sorprendió anunciando que la biblioteca estatal se instalaría en el auditorio, una afirmación que no tuvo confirmación y de hecho ni siquiera existe en la ciudad.

En fechas más próximas, el alcalde dio por seguro que el vivero de empresas de Zona Franca o la sede viguesa de la universidad a distancia (UNED) irían para el auditorio, que sorprendieron a la empresa y no se concretaron.

En estos momentos la concesionaria mantiene tres denuncias reclamando al Concello cifras millonarias por sus incumplimientos, sobre las que no hay sentencia todavía. Se han producido a pesar de que en el 2011 el alcalde decidió compensar a Pazo de Congresos con una ayuda económica de 5 millones de euros y ampliarle la concesión de 35 a 60 años, lo que no fue suficiente.