Las 42 bodegas de la comarca inician la selección de trabajadores para una campaña bajo la incógnita del tiempo
06 jun 2014 . Actualizado a las 07:00 h.Cuarenta y dos bodegas de la comarca de O Condado tienen previsto contratar a unas dos mil personas como temporeros para las labores de vendimia. La superficie del viñedo de esta subzona supera las mil hectáreas y los 1.241 viticultores inscritos como tales resultan insuficientes en la época de recolección, en la que muchas veces hay que acelerar el cortado de la uva para evitar que se deteriore en la vid. El año pasado se cosecharon 7,3 millones de kilos de fruto y es prematuro aventurar cómo irá la cosecha este año porque dependerá del tiempo.
El Centro de Desarrollo Local de Ponteareas recibió la primera oferta para la temporada de la vendimia de 2014 por parte de la empresa Synergie. La concejala de Empleo, Marisol Valado, firmó un convenio de colaboración con la citada ETT, por el que se ofertan 40 puestos de trabajo temporales. «Hay otra empresa que suele colaborar también con nosotros», dijo Valado. El año pasado 25 ponteareanos estuvieron trabajando en la recolección de uva.
En esta primera oferta, la ETT quiere captar interesados para trabajar en las bodegas de Salvaterra do Miño, con contrato laboral y alta en la seguridad social por el régimen especial agrario y salario por el convenio del sector.
Los candidatos necesitarán tener experiencia previa en vendimias, preferiblemente en bodegas, así como disponibilidad total para trabajar a partir de finales de agosto o septiembre. La fecha del inicio de la vendimia no está clara. «Nos últimos anos se retrasou polo tempo», señala Xosé Carlos Morell, ejecutivo de una bodega de Salvaterra.
La edila Valado destaca que «con esta nueva oferta ponemos a disposición de muchas familias un oportunidad de trabajo» dada la complicada situación laboral en la que se encuentran. Los interesados pueden presentar su currículo indicando su experiencia en vendimias, en las dependencias del Centro de Desarrollo Local de Ponteareas o en el correo electrónico orientacionlaboral@ponteareas.es.
Antonio González que lleva casi treinta años como responsable de campo y patrimonio de Bodegas Fillaboa señala que contratan para la vendimia entre 80 y 90 personas. Muchos vendimiadores proceden de la comarca y del vecino Portugal. González pone de relieve que en Fillaboa se hacía vino hace ya 250 años. Sin embargo, no fue hasta 1988 cuando se empezó a producir albariño. Antiguamente se elaboraban vinos con mezcla de distintas uvas y tinto que se exportaba a Argentina. Ahora es un momento delicado para la uva. «Estamos teniendo un tiempo muy cambiante lo que está influyendo mucho en la floración, que resulta muy irregular», señala González.
Premio en Francia
O Condado es una zona productora en auge. Solo en Arbo, que no llega a cinco mil habitantes, hay diez bodegas registradas. Y su prestigio internacional es enorme.
De hecho, un espumoso de este municipio acaba de ganar la medalla de oro en el concurso internacional de Burdeos. El champán de albariño está irrumpiendo con fuerza en el mercado español. Francisco Javier Piñeiro, de bodegas Eidosela, una cooperativa de sesenta viticultores, señala que la satisfacción por el galardón es «enorme porque Francia es la cuna de los mejores espumosos del mundo y también hemos ganado a otros vinos con mucho prestigio como algunos cavas catalanes».