Otras cafradas al volante de los jugadores del Celta de Vigo

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Welliton ha sido el último pero no el único, antes que él fueron Joan Tomás, que iba ebrio en dirección contraria, o Vagner, que conducía mientras hablaba por teléfono e incluso se enfrentó a los policías

05 may 2014 . Actualizado a las 19:42 h.

Coche de alta gama, ganas de diversión y un futbolista joven. Tres ingredientes para un cóctel peligroso que esta madrugada se ha vuelto a cumplir con Welliton. El ha sido el último jugador del Celta en salir de las noticias deportivas y pasarse por las de sucesos pero no ha sido el único en hacer cafradas al volante. El color celeste se ha visto empañado por otros conductores poco responsables que han supuesto más de un dolor de cabeza para el club.

El jugador Joan Tomás Campasol fue cazado de madrugada y borracho conduciendo en dirección prohibida por calles del casco histórico de Vigo. Los hechos sucedieron el 16 de agosto del 2011, sobre las 5 de la mañana. El media punta circulaba en su BMW acompañado pero se metió por una calle en sentido contrario hasta que se dio de bruces con unas escaleras y tuvo que parar. Antes, había pasado por delante de la jefatura de la policía local. Joan Tomás tuvo que dejar el coche en manos de su acompañante y el Celta le abrió un expediente informativo sancionador. El club reconoció en tonces que el futbolista superaba el horario permitido para los días festivos en el reglamento de régimen interno del club.

A finales de los años 90, el también jugador del Celta Claude Makelele sufrió un aparatoso accidente de madrugada en la AP-9, a la altura del barrio vigués de Teis. En este caso, en lugar de al volante de un BMW circulaba al frente de un Ferrari F-40 Módena que había estrenado recientemente. El jugador regresaba de O Porriño y, por causas que se desconocen, perdió el control de su vehículo. Pese a todo, resultó ileso del siniestro.

El centrocampista del Celta Claude Makelele salió ileso tras sufrir la madrugada de ayer un serio accidente de tráfico, en la autopista A-9, a la altura del barrio vigués de Teis. Makelele iba al volante de su Ferrari F-40 Módena estrenado hace tan solo diez días. Testigos presenciales aseguraron que el futbolista, que regresaba de Porriño donde el Celta había jugado un amistoso, hizo una maniobra brusca al llegar a la salida de Teis (Pontevedra) y perdió el control del vehículo.

Otro de los celtistas que también forma parte de la larga lista de infractores al volante es el del futbolista Rogerio Nuno Vagner, que en octubre del 2001 fue pillado en el exterior de Balaídos conduciendo hacia el aparcamiento de la zona vip y hablando al mismo tiempo por teléfono. En este caso, el deportista no dudó incluso en enfrentarse a los agentes, por lo que fue condenado a siete meses de cárcel y una multa de 3.470 euros.