El Gobierno deporta o multa en un año a 162 inmigrantes en Vigo

María jesús fuente / Alberto Sánchez VIGO / LA VOZ

VIGO

Los 162 deportados o sancionados en el último año procedían de 30 países

28 jul 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

Cada dos días se multa o expulsa de Vigo y su área metropolitana a una persona procedente de otro país. El pasado año fueron 162, de los cuales 81 personas fueron expulsadas y otras 77, sancionadas. Pertenecen a una treintena de nacionalidades, según datos de la Subdelegación del Gobierno.

Aunque los motivos de las deportaciones son diferentes, el más generalizado es por no tener los papeles de residencia en regla o el permiso de trabajo.

La lista global la encabezan los ciudadanos de Brasil, con un total de 31 casos, entre expulsados y multados, seguidos de Colombia, con 17. A más distancia se encuentran Rumanía, Paraguay, Marruecos y Senegal. En el polo opuesto están Ucrania, Chile, Namibia, Cabo Verde, Mauritania o Serbia, de donde solo fue multada una persona de cada país (ver tabla). Aunque el número de expulsados y multados está equilibrado, desde Cáritas apuntan que para la Administración «sale mejor económicamente poner una multa administrativa que deportar» a un simpapeles.

Las sanciones van desde los 500 a los 100.000 euros dependiendo de que la falta sea leve, grave o muy grave. A la hora de determinarla, uno de los aspectos que más se tiene en cuenta es la capacidad económica del infractor, así como el grado de culpabilidad y el daño producido. A los factores anteriores se suma el riesgo derivado de la infracción y su trascendencia.

En el caso de las empresas que contratan a trabajadores sin autorización de residencia y empleo, se exponen a la clausura del establecimiento. Se ha dado el caso de años en los que sesancionaba a una veintena de negocios en solo seis meses por emplear a 38 extranjeros en situación irregular, como sucedió en el 2011. Las multas superaron en total los 300.000 euros. En la mayoría de los expedientes se trataba de clubes de alterne, algunos de ellos reincidentes.

Aproximadamente seis de cada diez inmigrantes expulsados de la provincia residen en la ciudad o su entorno. El motivo que más atrae a la hora de elegir es la búsqueda de trabajo. En ocasiones se trata de mujeres que acuden engañadas por las mafias y acaban ejerciendo la prostitución. Esto explica que buena parte de los negocios sancionados sean clubes de alterne.

Después del entorno de Vigo, la segunda ciudad de la provincia con más población inmigrante es Pontevedra.

La mayor parte de los extranjeros que disponen de un contrato laboral trabajan en el sector servicios, sobre todo, en hostelería. Hasta hace cuatro años eran también bastantes los que encontraban empleo en comercios, establecimientos de alimentación y limpieza. Sin embargo, el incremento del paro en Vigo, que en la actualidad afecta al 26 % de la población, ha provocado que cada vez sean menos los extranjeros que logran un puesto de trabajo en estos sectores.

No solo eso, sino que muchos de ellos, procedentes de países como Brasil, Argentina, Uruguay y Ecuador, han optado por regresar a sus lugares de origen ante mejores perspectivas, al fallar también el sector de la construcción. Igual que ha descendido el número de los que residen y trabajan en la ciudad de forma legal, también lo han hecho los que carecen de papeles en regla. El paro entre los extranjeros residentes en Vigo aumentó un 16 % en solo un año.

Por continentes, el mayor contingente de extranjeros en el padrón procede de América (central y del sur), sobre todo de Colombia, Brasil y Perú, seguido de África, con predominio de Marruecos, Asia, Europa, América (del norte) y Oceanía.