También se pone en marcha un servicio de lanzaderas con Valença, llamadas Celtas Cortos, que harán paradas en varios municipios
02 jul 2013 . Actualizado a las 03:47 h.El billete único y la eliminación de quince paradas acaban desde hoy con las tres horas y cuarto que separaban en tren Vigo y Oporto y con la interrupción del viaje en Valença do Minho para comprar otro billete. Diez años después de que se iniciaran los primeros intentos, el automotor directo reduce el viaje en una hora y permite circular por los dos países con un billete, algo en apariencia sencillo, pero que se encontró con una traba tras otra. En principio, las mejoras se limitan solo a estos dos aspectos. El tren, un automotor modelo 492, sigue siendo el mismo que existía con anterioridad, con una antigüedad que ronda los veinte años. La velocidad media es de 71 kilómetros por hora al existir muchos tramos de vía única en el país vecino, lo que le obliga a efectuar paradas técnicas de minutos.
Tanto la ministra de Fomento, Ana Pastor, como el titular de Economía portugués, Álvaro Santos Pereira, destacaron ayer en la inauguración que se trata del primer paso para continuar con la electrificación total de la vía. Su conclusión está prevista para el 2016 y permitirá ahorrar casi otra hora de viaje.
Pastor admitió que «es el avance que se podía hacer en este momento» para facilitar la conexión entre las dos ciudades y, por tanto, del eje atlántico. Destacó la importancia del momento, «no porque hayamos hecho una proeza, sino porque hemos puesto la primera piedra de esta comunicación directa».
Explicó que se ha constituido también un grupo de trabajo de mercancías para fomentar el transporte por ferrocarril, cuya cuota actual es del 4 % del total de toneladas por kilómetro.
El tren directo que hoy se pone en marcha con el nombre de Celta tendrá dos frecuencias diarias durante toda la semana con salida de Vigo a las 9.02 y 19.54 horas y desde Oporto a las 8.15 y 19.15. El precio por trayecto es de 14,75 euros.
La idea es que sirva de revulsivo para dinamizar el turismo entre Galicia y el norte de Portugal, así como para facilitar los traslados por motivos laborales y de negocio.
La riqueza paisajística del trayecto es una de las mayores bazas de esta ruta, tal como ayer pusieron de manifiesto los ministros de ambos países durante el viaje inaugural.
Para Álvaro Santos Pereira, es fundamental la aproximación de España y Portugal, de ahí que se estén estudiando todas las posibilidades que contribuyan a ello. El tren directo, dijo, solo es el primer paso para intentar integrar los dos sistemas ferroviarios.