La Xunta estudia una multa de 6.000 euros a Vigozoo por la fuga del mono «Nano»

Juan Manuel Fuentes Galán
juanma fuentes VIGO / LA VOZ

VIGO

Expedienta al complejo de animales por falta grave

07 may 2013 . Actualizado a las 11:41 h.

El expediente abierto por la Consellería de Medio Ambiente al zoológico de A Madroa por la fuga del mono Nano concluirá muy probablemente con una sanción de 6.000 euros. Desde el departamento autonómico se califican lo ocurrido como una infracción grave, entre las que figuran «la liberación no autorizada, negligente o intencionada de los animales de un parque zoolóxico», según la ley 31/2003 que regula estas instalaciones.

En este caso concreto la Xunta ha iniciado esta investigación tras la denuncia presentada por la asociación animalista Libera, una vez que el caso fue dado a conocer por este periódico. No obstante, la sanción habría podido ser mucho más elevada pues la normativa legal prevé en estos casos multas que oscilan entre 600 y 60.000 euros. Por tanto, la Xunta opta por dejarla en la escala inferior, aunque todo dependerá de como concluya el expediente abierto.

El plazo máximo para resolverlo es de seis meses desde la fecha de incoación del expediente. En la fase actual el zoológico vigués, que depende del Concello, dispone de un plazo de 15 días para presentar alegaciones. De no hacerlo la propuesta de sanción sería firme, y de presentarlas la Xunta decidirá una vez estudiadas.

El motivo de investigar esta fuga se debe a que Medio Ambiente entiende que Vigozoo no ha llevado a cabo las medidas necesarias para evitar fugas de animales. Obviamente, la salida de Nano es una prueba irrefutable ya que se produjo sin que mediara ninguna incidencia especial y mediante un simple salto. A partir de ahora será muy difícil que un mono pueda repetir el sistema ya que los responsables de la instalación han colocado un pastor eléctrico en el borde del recinto.

Esta fue la decisión adoptada con urgencia al trascender la fuga. De hecho, una vez que el mono fue devuelto al zoológico él y sus compañeros fueron encerrados en la parte cubierta para ejecutar las obras. Estas se alargaron durante varias semanas ya que la dirección del zoo aprovechó para realizar reformas pendientes en el foso de agua, donde existían grietas y filtraciones.

Aunque la marcha de Nano no provocó ninguna reacción pública en el organismo municipal Vigozoo, la realidad es muy diferente. El hecho de que por primera vez se fugara un mono de A Madroa fue considerada un hecho muy grave al margen de que la peligrosidad de un macaco de Gibraltar no sea excesiva. El expediente y la previsible sanción de la Xunta confirman que ni mucho menos es un incidente sin relevancia.

Satisfacción de Libera

Los denunciantes de la infracción del zoo calificaron ayer de «un paso al frente en defensa de los animales y un compromiso con la legislación» el expediente abierto por la Xunta. Recuerda esta organización que «los parques están obligados a superar una serie de exigencias» y en este caso ellos dudan de la legalidad de Vigozoo.

Por su parte, el gobierno local no ha hecho comentario alguno sobre la fuga ni tampoco después sobre la posibilidad de que ahora sea sancionado por la Xunta. A lo largo de los últimos años se han producido denuncias sobre las instalaciones, a las que el Concello respondió realizando obras para mejorar los recintos de los animales.