La policía cree que las sanciones de la Inspección de Trabajo dan frutos
26 mar 2013 . Actualizado a las 14:27 h.La Policía Nacional ha detectado una menor presencia de extranjeras indocumentadas o sin permiso de residencia que trabajan irregularmente en los clubes de alterne de Vigo y su área. Todo apunta a que las fuertes sanciones que imponen los inspectores de trabajo a los dueños y encargados de los locales han sido disuasivas. Ante el riesgo de una elevada multa, los empresarios de la noche prefieren contratar a extranjeras que tengan la documentación y el permiso de residencia vigente. Al menos, esa es la principal hipótesis que manejan expertos de la comisaría de Vigo.
Un indicio de este descenso es el número de primeras asistencias a detenidos que presta el Colegio de Abogados. En lo que va de año, los letrados de oficio hicieron 787 servicios frente a las 956 llamadas que recibieron en el mismo período del 2012. Son 169 arrestos menos. Fuentes policiales creen que la tasa de criminalidad se mantiene en la tónica del año anterior, lo mismo que el número de detenidos por delitos. Por ello, el descenso de los detenidos podría explicarse por el menor número de comparecencias en comisaría de extranjeras simpapeles, que también son asistidas por abogados y que computan en las estadísticas del colegio.
Ese descenso de trabajadoras irregulares viene acreditado por los resultados en las últimas redadas en barras americanas y otros establecimientos. Según fuentes policiales, la mayoría de las mujeres detectadas en estos locales son ciudadanas de la UE y, por tanto, tienen permiso para la libre circulación por España. Y otras ya han legalizado su situación de estancia en el país. Sin embargo, a diferencia de otros años, los agentes, acompañados de los inspectores, apenas han encontrado inmigrantes irregulares y, por tanto, las detenciones son menores que otros años.
Aunque no hacen mención a las identificaciones de prostitutas que ejercen en la calle, todo apunta a que las redadas tampoco han detectado muchas ilegales.
En una reciente redada en un club de A Ferrería se detuvo a los regentes rumanos del local pero porque tenían retenida por deudas a una compatriota que vendió su novio.