Anulado el lanzamiento de tres mil bollos de leche desde un balcón del centro de Vigo

Begoña Rodríguez Sotelino
B. R. SOTELINO VIGO / LA VOZ

VIGO

Una empresaria retira la iniciativa tras recibir vitriólicas críticas en las redes sociales

15 feb 2017 . Actualizado a las 14:11 h.

Cristina de Andrés está logrando convertirse en todo un personaje que sobresale por sus curiosas iniciativas que, últimamente, se vuelven contra ella. La responsable de la empresa de brokers especializados que lleva su nombre y que se dedica a la asesoría en inversiones y protocolo empresarial, se levantó un día con cuerpo benefactor y decidió que, para estas Navidades, una gran idea sería «arrojar» por el balcón de su despacho en la céntrica calle de Urzaiz, nada menos que tres mil bollos de leche en colaboración con una panadería viguesa. El plan se iba a ejecutar los días 22 y 23 con la intención de ayudar, «dada la situación que están viviendo muchas personas y familias, nadie se quede sin pan en estas fechas».

Al poco tiempo de anunciarlo esta mañana, y tras recibir decenas de críticas vitriólicas a través de sus redes sociales, ella misma se desdecía. Primero se justificó explicando de nuevo, que el acto tenía un significado positivo. Luego, decidió que en vez de lanzar los bollos por el balcón, serían entregados, en mano, por ¡dos papanoeles! Y una hora después «para prevenir malas interpretaciones», decide cancelar tan «magnífico» evento y asegura a través de su cuenta en Facebook (que poco después dejó de visualizarse) que nunca dijo que iba a «arrojar» los productos de pastelería. En fin, que ya no hay bollos para nadie.

Invitación a Belén Esteban

Cristina de Andrés saltó a los medios de comunicación este verano, tras invitar a Belén Esteban a pasar con ella una jornada para enseñarle nociones de protocolo. Como la Esteban aún no había sido instruida en el tema, se saltó la primera norma. Es decir, la dejó plantada. Pero De Andrés tuvo la delicadeza de disculparla diciendo que la mediática tertuliana sufrió una indisposición que le impidió acercarse a su empresa.

La ex de Jesulín volvió una semana más tarde para hacer el cursillo y, de paso, el reportaje, claro. Hace seis años también aireó sus problemas con los arrendadores del despacho que ocupa en el centro de Vigo por problemas estructurales del edificio.

Pero sobre todo, Cristina de Andrés es conocida por los vigueses que pasan delante de la sede de su empresa porque, en Navidad, desde hace cuatro años, difunde villancicos a todo volumen desde el balcón de los bollos frustrados. Este año, unos papanoeles se asoman a la ventana. Aunque Papa Noel, según la tradición, solo sea uno, Cristina de Andrés se supera y pone dos. Y si la dejan, seis reyes magos y dos niños jesuses.