El BNG plantea convertir NCG en un banco público gallego

VIGO

Los nacionalistas convertirán el Igape en un instituto de crédito y advierten que rescatarán del sector privado la construcción del hospital de Vigo

26 sep 2012 . Actualizado a las 12:55 h.

El BNG demandará del Estado la transferencia a la comunidad del capital de Novagalicia Banco en manos del Fondo de Reestructuración Ordenado Bancario (FROB) para convertir dicha participación en la base de un banco público de Galicia. El anuncio fue hecho hoy en Vigo por el exportavoz parlamentario del Bloque Carlos Aymerich, que presentó dicha propuesta como una de las que llevará a cabo su formación en caso de acceder al Gobierno que resulte de las elecciones autonómicas de octubre, «xa que é un patrimonio e un instrumento dos galegos desde hai máis de 200 anos», señaló, además calificar a dicha entidad de una «verdadeira ferramenta» que, a su juicio, debería jugar un papel protagonista en la apuesta por el sector productivo de la comunidad y la financiación de su industria. «A pesares de todo, Novagalicia Banco segue a ter o 40% do seu negocio en Galiza, e debe seguir a estar comprometida co país», reiteró Aymerich, quien apeló al artículo 55 del Estatuto de Autonomía para reclamar dicha tranferencia en virtud de la garantía que dicho texto da a la presencia de la Administración autonómica en las empresas estatales de la comunidad y sus órganos de decisión.

El Bloque también incluirá en su programa electoral la conversión del Igape en un instituto gallego de crédito e inversiones, así como reclamará una tarifa eléctrica especial en Galicia, como comunidad productora de energía, para que se reconozca de esda forma su aportación al sistema eléctrico estatal y al mismo tiempo se le compense de los perjuicios que dicha producción genera en el medio ambiente gallego.

El rescate de la adjudicación de la construcción del nuevo hospital de Vigo, sería otra de las medidas que impulsará el BNG en caso de participar en el nuevo Gobierno gallego. Según Aymerich, solo habría que rescatar el contrato para devolverlo a manos públicas, ya que, según aseguró, los imcumplimientos de las obligaciones que acumula la sociedad encargada de la construcción de dicha infraestructura sanitaria permitiría recobrar para la iniciativa pública la obra y su gestión sin excesivos impedimentos.