La celebración de un curso de caza para menores llega al Valedor do Pobo

L.C.S. FORNELOS / LA VOZ

VIGO

La asociación naturalista Libera dice que está organizado por una sociedad deportiva y que colabora la federación gallega

04 may 2012 . Actualizado a las 11:32 h.

La asociación animalista Libera ha decidido trasladar al Valedor do Pobo una denuncia sobre la organización de un curso de caza para menores que se celebrará en el Concello de Fornelos de Montes el próximo 30 de junio. Advierten que, para su difusión entre los posibles usuarios, se utilizan las fotografías de varios niños en el cartel promocional. La entidad Libera resalta que este cartel permanece en la página web de la Federación Galega de Caza, entidad colaboradora con la jornada organizada por una sociedad deportiva, y que es de carácter gratuito, según figura en la página digital.

Libera solicitará al alto comisionado gallego que indague sobre las particularidades de esta actividad, y que trate, desde el ejercicio de sus competencias, de solicitar a los promotores y patrocinadores que se abstengan de celebrar tal jornada de caza. La entidad recuerda, asimismo, que solo a partir de los 16 años los menores pueden portar un arma y que con 14 pueden realizar algunas actividades cinegéticas de acompañamiento. Para los animalistas, «se trata de unas jornadas que pretenden mostrar imágenes irreales de lo que conlleva ser aficionado a la caza: la muerte de los animales, la sangre y la violencia de un deporte que es financiado por la Xunta».

El programa de la jornada, al que ha tenido acceso la organización defensora de los animales, contempla charlas como «A Montería, diferencias co gancho», una modalidad «especialmente violenta» que emplea perros, o «Cría de coellos en semiliberdade». La actividad cierra el día con una clase práctica «A Caza con can: coello, perdiz» que tendrá lugar el mismo día en Monte Suido. Para Libera, el contenido de la actividad muestra «la desesperación del lobby de la escopeta por buscar un relevo generacional que no parece llegar, y es que los más jóvenes rechazan la caza y todo lo que le rodea».

Los animalistas muestran su sorpresa de que un curso de esta tipología pueda hacerse en Galicia, pues, «además de mostrar una imagen dulcificada de la caza, mostrando al cazador como protector de la naturaleza y defensor de los animales, pretende formar una idea equivocada en la mente de los más pequeños, de los que gran parte no podrán cazar hasta pasados los 16 años, como establece la propia normativa autonómica».