Obras para evitar choques frontales

J. Santos CANGAS / LA VOZ

VIGO

M. MORALEJO

La Xunta comienza la construcción de medianas de hormigón en cinco tramos y la instalación de 240 balizas a lo largo de doce kilómetros del vial de O Morrazo

17 ene 2012 . Actualizado a las 12:21 h.

Xérmolo, una empresa contratada por la Xunta, inició ayer las obras de mejora de la seguridad en el corredor de O Morrazo. El objetivo es frenar la grave siniestralidad en un vial de doble sentido, de casi 15 kilómetros de longitud, con un tráfico medio diario que supera los 16.000 vehículos y que ya se ha cobrado diez muertes desde su apertura, en diciembre del año 2005.

Las obras fueron adjudicadas por el sistema de urgencia tras fracasar la adjudicación del desdoblamiento de este vial para convertirlo en autovía. Tienen por finalidad evitar los choques frontales por invasión del carril contrario, que fueron los que causaron todos los accidentes mortales. Así lo indicó ayer la responsable de Infraestructuras, Ethel Vázquez, quien convocó a los medios en el propio corredor para explicar qué se va a hacer y cuánto durarán los trabajos.

Consisten en instalar medianas de hormigón de ochenta centímetros de alto en cinco tramos en los que hay suficiente ancho (en 2.800 metros en total) y, en los doce kilómetros restantes, crear una imagen visual de separación de los carriles mediante 250 balizas plásticas cilíndricas colocadas cada 50 metros.

Estrechamiento de carriles

La instalación de las medianas conllevará el estrechamiento de los carriles en los cinco tramos que ocupan. Pasarán de 3,50 a 3,10. La barrera de hormigón tiene una base de 60 centímetros. A cada lado se dejarán libres 40 centímetros, con lo que la separación entre carriles será de 1,40 metros.

El primer tramo estará listo esta misma semana si las condiciones meteorológicas lo permiten. Son 800 metros que separarán el vial de subida en la única zona en la que existe un carril de lentos, que fue precisamente donde se produjo el último accidente mortal del corredor. Comienza justo al pasar el túnel de Montealegre.

Las obras en los accesos de A Fraga (la segunda salida) y Cangas (la cuarta) obligarán a desviar el tráfico por los correspondientes enlaces. Así, el conductor tomará la salida, circulará hasta la rotonda y, a continuación, podrá volver al corredor metiéndose en el ramal de incorporación.

Para construir las medianas en el enlace de Moaña (el tercero), se desviará el tráfico en sentido Rande y se utilizarán semáforos en el contrario. En el de Domaio se regulará con semáforos en ambas direcciones. La Xunta calcula que a finales de febrero estarán las obras concluidas.

La previsión es trabajar de 9.00 a 17.00 horas y dejar completo cada tramo, incluyendo la instalación de las balizas, antes de pasar al siguiente, según indicó el ingeniero de la Xunta que dirige las obras, José Enrique Pardo. Solo quedarán para el final los resaltos (la banda rugosa).

Las balizas serán similares a las que hay en los viales de incorporación, verdes con dos franjas reflectantes blancas. Su función es solo marcar el eje de la calzada. No suavizarían el golpe si un conductor invade el otro carril.

La diputada socialista Carmen Gallego indicó que estas mejoras se deberían haber hecho hace dos años. «O Goberno de Feijoo sempre reacciona demasiado tarde», dijo. «Estivo enredando co proxecto de desdobramento que lle deixou o bipartito tres anos», añadió.