Martínez Garrido acoge la primera biblioteca de barrio

Jorge Lamas Dono
Jorge lamas VIGO / LA VOZ

VIGO

Santiago Domínguez adelantó que se construirá otra en Navia y dos agencias de lectura en Valadares y Fragoso

25 mar 2011 . Actualizado a las 06:00 h.

El número 21 de la calle de Martínez Garrido acoge desde ayer la primera biblioteca pública que se construye en un barrio. Llevará el nombre del escritor Xosé Neira Vilas, quien ayer se acercó hasta el lugar para presidir el acto inaugural del nuevo centro educativo y cultural.

El proyecto comenzó a gestarse en enero del año 2009, cuando el teniente de alcalde Santiago Domínguez anunciaba su creación con el objetivo de terminar con la «vergonzosa situación de Vigo no tocante ás bibliotecas». El edil nacionalista avanzó la puesta en marcha de del segundo centro de proximidad en Navia, dentro de la Rede Municipal de Bibliotecas y las dos primeras agencias de lectura en Valadares y Fragoso.

El centro cuenta con 66 puestos de usuario, ampliables a 72, distribuidos en zonas de lectura, audiovisuales, consulta, catálogo, información y de ordenadores de uso libre. La biblioteca se dotará progresivamente hasta un máximo de 11.000 ejemplares. A lo largo de este año, llegará a los 7.824, de los que 814 fueron aportados por la Consellería de Cultura e Turismo, que también aportó el mobiliario. La inversión total superó los 1,2 millones de euros, de los que el Concello financió el 50%. El resto de la inversión corrió a cargo del Plan FEIL con 457.000 euros y la Consellería de Cultura con 166.000 euros.

Santiago Domínguez hizo entrega a Neira Vilas del primer carné de la biblioteca. El escritor mostró su «grande emoción porque o Concello de Vigo decidira darlle o meu nome a esta biblioteca do Calvario, un barrio este con moita historia». Junto al autor de Memorias dun neno labrego también estuvieron en la inauguración Xesus Alonso Montero y Antía Cal.

Cándido Pazó

Para concluir el acto, Cándido Pazo representó el monólogo Memoria das memorias dun neno labrego. Según el actor, no se trata de una adaptación al pie de la letra, «máis ben un monólogo escénico-narrativo».