Mujeres de mucho juicio y de palabra certera

VIGO

09 mar 2011 . Actualizado a las 15:54 h.

1Hubo ayer unanimidad total en el veredicto: «El arroz con bogavante está de vicio». Por primera vez (que se sepa), la sentencia llevaba al pie la firma no solo del juez (en este caso las juezas), sino también del fiscal (en este caso las fiscalas). En ambos colectivos las mujeres suman en los juzgados de Vigo un total de medio centenar de profesionales.

El caso es que decidieron aprovechar al celebración del Día de la Mujer para demostrar que sus posibles diferencias de criterio pertenecen al terreno laboral, pero que en el personal lo que prima es la cordialidad cuando no la amistad. Lo hicieron, claro, como se hacen estas cosas, con una comida.

El punto de encuentro fue el restaurante del hotel Nagari. Allí compartieron mesa y mantel, entre otras, Belén Rubido, Carmen Salvador, Isabel Castro, Margarita Guillén, Marisol López, Marisa Berges, Pilar García, Rebeca Cordeiro, Rosa Barral, Tatiana de Francisco, Camino Coello, Carmen García...

Como los horarios en la calle Lalín son los que son, a las cinco de la tarde todavía no habían llegado al postre. Puestas a profundizar en la distensión (que ya he dicho que no necesitan porque no hay tensiones), algunas miraban con ojos cucos la oferta de spa del establecimiento. Fijo que terminaron claudicando a sus beneficios. Si llegar al trabajo relajado y de buen humor es siempre deseable, cuando el trabajo en cuestión es impartir justicia, no tiene precio.

Poesía, en femenino

2El Día de la Mujer ha sido el paraguas perfecto para el recital poético en femenino que, desde hace una década, ha venido celebrando Comisiones Obreras y en el que siempre ha contado con una complicidad de lujo, la de Carmen Kruckenberg.

La elección de los tiempos verbales de las nueve líneas precedentes no es casual. Y es que el sindicato ha decidido cerrar el ciclo en este décimo aniversario (día 11, Casa Galega da Cultura, 19.30 horas). Será con una antología en la que se recoge un poema de cada una de las escritoras (18 en total) que han participado en el proyecto. Y de los hombres. Porque en Elas, que es como se bautizó la iniciativa, también hubo tres Eles (Román Raña, Francisco Catro y Lino Braxe) por expresa decisión de Carmen.

También fue ella la que eligió a una más que cuidada nómina de mujeres, de estilos y edades bien dispares, lo que convierte a la colección en una pequeña joya. Algunas convocaron a las musas de forma expresa para la ocasión, lo que se traduce en la publicación de trabajos inéditos.

Recuerda Elena Rodríguez, responsable de la Secretaría da Muller de CC. OO., que fue el caso, entre otras, de la desaparecida Xela Arias, «que recitou con nós os seus últimos poemas». En el capítulo de agradecimientos cita expresamnete al grupo musical Aldraba, «que participa connosco dende o primeiro ano»; Ana Simón y Milagros Portabales, «as que sempre temos presentes» y, por supuesto, a Carmen Kruckenberg, «a alma desta antoloxía».

Es precisamente Carmen la que me cuenta que no ha sido fácil el reto que ha asumido durante todo este tiempo, pero que lo ha hecho con gusto. Dice también que la respuesta de sus colegas no pudo ser mejor, hasta el punto de que ninguna le dijo que no.

Las puertas a las que llamó fueron las de María Xosé Queizán, Mónica Bar, Carmen Panero, Xela Arias, Marica Campo, Yolanda Castaño, Ánxeles Penas, Emma Couceiro, Luisa Villalta, Antía Otero, Ana Romaní, María Mariño, Ana María González, Cristina Pusone, Luz Pozo, Pilar Pallarés y Dores Tembrás.

En el recital del próximo viernes se leerá un poema de cada una de ellas. Y de ellos también. Las encargadas de hacerlo serán Carmen Panero, Marita Vázquez de la Cruz, Laura Pérez y, por supuesto, el alma máter de la colección, Carmen Kruckenberg. La cita a partir de las 19.30 horas, en la Casa da Cultura.