El astillero Armón tiene previsto entregar el buque al Instituto Español de Oceanografía en verano.
21 feb 2011 . Actualizado a las 22:26 h.La ministra de Ciencia e Innovación, Cristina Garmendia, ha celebrado su cumpleaños en Vigo, donde ha presidido esta tarde botadura del nuevo buque oceanográfico Ramón Margalef, de 46 metros de eslora. El barco, amadrinado por la gallega Rosalía Mera, es el primero de un pedido por valor 36 millones que permitirá modernizar la flota del Instituto Español de Oceanografía.
El astillero vigués Armón asumió la construcción del Ramón Margalef tras la quiebra de M.Cíes, a quien se le había adjudicado inicialmente. Este problema ha retrasado los plazos previstos inicialmente y es probable que el buque no esté en funcionamiento hasta finales de este año. El astillero lo entregará al IEO en verano y después se ha previsto un plazo de varios meses para que los técnicos se familiaricen con todo el instrumental, entre los que se encuentra un sistema de posicionamiento submarino, para poder usar los robots de observación romota, como el Liropus2000 con capacidad para observar y muestrear los ecosistemas hasta 2.000 metros de profundidad.
El buque oceanográfico cuenta con tres motores diesel de 1040 caballos que le permitirá circular a una velocidad de 13 nudos. Tiene diez días de autonomía y espacio para once investigadores, además de sus doce tripulantes. Entre sus elementos más destacables figura «su homologación como barco sin ruido» y «calificado como limpio», como destacaba Eduardo Balguerías, director del Instituto Español de Oceanografía.
La ministra ha calificado el buque como «uno de los laboratorios flotantes más avanzados de España», algo que calificó como un «hito» para la comunidad de ciencias marinas. El barco desarrollará su actividad en el ámbito nacional y será multipropósito, porque permitirá estudiar la geología marina, oceanografía física y química, biología marina, pesquerías y control medioambiental.
El astillero Armón comenzará ahora la construcción del segundo buque para la IEO, el Ángeles Alvariño, cuya entrega está prevista para el verano del 2012.