Un nuevo accidente vuelve a colapsar el corredor do Morrazo

J. Santos MOAÑA / LA VOZ

VIGO

Hubo tres heridos leves y un carril tuvo que ser cortado al tráfico hora y media

11 feb 2011 . Actualizado a las 06:00 h.

Minutos antes de las nueve de la mañana de ayer se produjo un accidente en el viaducto de A Moura, en el corredor de O Morrazo, en el que vieron involucrados cuatro turismos. Se saldó con tres heridos leves y el desvío del tráfico procedente de Cangas por el estrecho vial que baja de San Lourenzo a Domaio durante hora y media. Sobre las 10.30 quedó restablecida la normalidad.

El causante fue el conductor de un Chevrolet de color gris, matrícula 6345 FNG, que circulaba en dirección a Cangas. Se encontró delante, a unos 500 metros de la salida de San Lourenzo, una camioneta marchando en su mismo sentido a baja velocidad. Dio un volantazo para no alcanzarla por detrás, según indicó el señor, o bien para adelantarla.

Invasión de carril

El caso es que invadió el carril contrario, golpeando primero frontolateralmente a un Mazda de color rojo; inmediatamente después a un segundo vehículo en el lateral izquierdo, a la altura de la rueda, y finalmente, de frente, a un Citroën. El Chevrolet quedó parado en medio de la calzada.

En cada uno de los cuatro coches solamente iba una persona, su conductor. Todos salieron por su propio pie, aunque el causante, la chica que llevaba el Mazda y el del Citroën fueron trasladados en ambulancia a Vigo, al hospital Concheiro.

La Guardia Civil cortó al tráfico el carril en dirección Cangas-Vigo, desviándolo por la salida de San Lourenzo, con lo que los vehículos tuvieron que bajar hasta el centro de Domaio por la estrecha carretera de acceso a este barrio y al campo de golf para continuar su ruta.

Los dos coches que sufrieron más daños fueron el Chevrolet y el Citroën.

Distancia de seguridad

Una constante en la mayoría del aproximadamente medio centenar de accidentes que se produjeron en el corredor de O Morrazo desde su apertura al tráfico, en diciembre del 2005, es la inobservancia de la distancia de seguridad respecto al vehículo que va delante, lo que impide al conductor reaccionar.

En los poco más de cinco años que está operativo, se produjeron nueve muertos, de los que ocho fueron en el primer semestre del año pasado, y algo más de un centenar de heridos.

La densidad de tráfico que soporta el vial es de unos 17.000 vehículos al día, si bien durante los primeros meses del 2010 bajó el número de coches a causa de la oleada de víctimas. Un porcentaje significativo de conductores volvieron a la vieja carretera PO-551 para desplazarse entre Cangas y Vigo.