Hacía tres años que no se le oía, pero ha vuelto con una fuerza comparable a la que alcanzó con su doble disco Honestidad brutal hace ya más de una década. Tres años después de publicar su último álbum, Calamaro vuelve con On the rock , que cuenta con las colaboraciones de Bunbury, Calle 13 y Diego El Cigala entre otros.
Con más de veinte discos en su haber, Calamaro apuesta en esta ocasión por una mezcla de estilos tan distantes como el flamenco, el rock y el folk. La gira de presentación del nuevo disco comenzó en Argentina con gran éxito, y ahora recorre España con la misma suerte. Para su encuentro con el público madrileño tuvo que ampliar un día más su estancia, que ayer celebró su primera sesión y esta noche revalida con la segunda. A Vigo llega este sábado, y es su única cita prevista con el público de Galicia, donde cuenta con una clientela fiel a la que no visitaba desde que tocó en octubre del año pasado en Santiago de Compostela. Pero desde entonces, varias cosas han cambiado. La que menos importa a la hora de disfrutar de su talento es una imagen en la que ha optado por el pelo corto y un estilo más dandy. Lo que se añade es su repertorio, que se ha ampliado aunque al argentino le sobran buenos temas para componer un gran recital de melodías cargadas de buenas historias.
Últimas composiciones
A las últimas composiciones como El pasodoble de los amigos ausentes, Todos se van, Los Divinos o la festiva Me envenenaste , se suman en esta gira On The rock canciones de sus anteriores discos así como homenajes a otros músicos a los que admira.
El repertorio va cambiando, pero en general, suele apostar por versiones de The Rolling Stones, Simon & Garfunkel, John Lennon, Sting o Bob Marley, canciones propias que ya son clásicos como Flaca, Comida china, Todavía una canción de amor, Paloma, Ansia en Plaza Francia o Te quiero igual . El set list es, en todos los casos, muy generoso. La disolución de Los Rodríguez no significó el fin de Calamaro como músico. Su creatividad artística creció en solitario y lo demuestra con cada trabajo nuevo. En el año 1997, cuando la etapa de su grupo Los Rodríguez había concluido, Andrés graba su primer trabajo como solista, titulado Alta suciedad . Los altibajos de popularidad del músico han coincidido más con estados de ánimo que con su capacidad creativa, siempre desbordante. Como ejemplo, las 103 canciones que integraron su disco quíntuple, El salmón , que rompió con todas las normas del mercado.