La concesionaria de las obras gestionará los servicios no sanitarios del nuevo centro pero también de Meixoeiro, Nicolás Peña y de los que quedarán en el Xeral.
10 dic 2010 . Actualizado a las 12:22 h.Dos años y medio es el plazo que le da la Xunta a las empresas que quieran encargarse de la construcción del nuevo hospital de Vigo. La conselleira de Sanidade, Pilar Farjas, ha dado a conocer hoy algunos de los principales datos del estudio de viabilidad elaborado por el Sergas y ha desvelado los servicios que podrá gestionar la concesionaria, todos ellos «no sanitarios», como se encargó de reiterar Farjas.
El nuevo calendario presentado para la Xunta prevé que las obras del nuevo hospital puedan iniciarse a finales de este año. Del mismo modo, el Sergas prevé que la empresa pueda entregarlas en el primer semestre del 2013 y en el segundo se pueda poner en servicio el nuevo hospital, que contará con 1.465 camas y 35 quirófanos.
Como ya había adelantado hace unos días, el Sergas considera que la mejor alternativa para construir el nuevo hospital es un modelo concesional de pago aplazado. Farjas recordó que es una formula permitida gracias a una ley del 2007 de «un gobierno socialista» y que permite obtener financiación para macroproyectos en el menor tiempo posible. El coste de la construcción del hospital se distribuirá a lo largo de su vida útil con un canon anual y la gestión de servicios no sanitarios, que la Xunta empezará a pagar cuando se le entregue el nuevo hospital.
Quedan excluidos del contrato de concesión la expropiación de los terrenos, la prestación sanitaria, los sistemas informáticos y el equipamiento médico. En cambio, la concesionaria podrá gestionar otros servicios como lavandería, restauración, limpieza, seguridad o desinfección en el nuevo hospital y también en el Meixoeiro, Nicolás Peñas y los anexos del Xeral. A este respecto, Farjas recordaba que son «servicios mayoritariamente ya externalizados» y que la Xunta mantendrá controles de calidad sobre ellos, al igual que ya se realiza actualmente.
La consellería de Sanidad aseguró en su visita a Vigo que todavía es muy pronto para determinar el canon que deberá pagar la Xunta ya que el documento que mañana saldrá a exposición pública es un estudio de máximos que durante un mes podrá recibir alegaciones. Las empresas además podrán en sus ofertas recortar plazos, presupuestos y será a la hora de licitar el proyecto cuando se fijará el canon.
En este sentido, Sanidade ha recordado que las obras de construcción del nuevo hospital tienen un presupuesto de ejecución estimado de 412 millones de euros y la empresa que lo realice obtendrá una concesión por 20 años. La rentabilidad del proyecto, según la Xunta, es de un 8,7% y Farjas se mostró segura de que habrá empresas interesadas en presentar ofertas para la que será «la infraestructura más importante de la legislatura».
Nuevo panorama
La entrada en funcionamiento del hospital supondrá un rediseño de los usos en toda la red sanitaria viguesa. El centro de referencia será el de Beade y la única puerta de urgencias, que contará con un espacio de 5.000 metros cuadrados. El Xeral quedará sin uso sanitario y únicamente en sus anexos permanecerá un Centro de Alta Resolución y el Punto de Atención Continuada. Meixoeiro y el Nicolás Peña se especializarán en Oncología y Salud Mental, mientras que Rebullón y Cíes dejarán de tener uso sanitario. Se mantendrá el concierto del Sergas con Povisa, que será un centro de atención general de libre elección.