El tramo conecta con la A-55 de Tui y evita que los coches tengan que atravesar el centro de O Porriño
30 dic 2008 . Actualizado a las 11:30 h.Un paseo sin guía a través del polígono de As Gándaras o dos kilómetros a velocidad reducida por el centro de O Porriño. Estas eran, hasta ahora, las alternativas de los vecinos de Salceda y parte de los de Salvaterra para coger la autovía A-52 en dirección a Vigo. En el primero de los casos, el trayecto obligaba a maniobrar por medio de las naves para finalmente incorporarse al vial. En el segundo, los coches y camiones debían sufrir paradas varias por los badenes, pasos de peatones y otros inconvenientes hasta llegar al enlace.
Esta situación, llegó ayer a su fin. La conselleira de Política Territorial, María José Caride, inauguró la conexión de la PO-510 entre Atios y Salvaterra con la N-550 a la altura de O Porriño. De este modo se puede acceder a la A-55, que une la villa del Louro con Tui y posteriormente con la A-52, que va directamente hasta Vigo. En definitiva, un vial que facilitará los traslados de los vecinos de Salceda y Salvaterra y las numerosas empresas de cantería que existen en las parroquias de O Porriño, como Atios, próximas a la entrada del nuevo vial.
La medida llega a buen puerto seis años después de que se iniciase, «pola parálise do anterior goberno na Xunta», según el departamento autonómico.
Para tráfico pesado
En total se han invertido 3,1 millones de euros, que sirvieron para la construcción de un puente sobre la N-550 y las vías del tren. La nueva estructura se diseñó con la capacidad de altura pensada para el tráfico pesado que circula en la actualidad y que se verá aumentado por la futura construcción del puerto seco en Salvaterra As Neves. Los trabajos supusieron la construcción de dos glorietas, el refuerzo del firme y la ampliación del tramo final de la carretera a lo largo de 180 metros para habilitar hasta cuatro carriles.
Para facilitar la incorporación a la autovía de Tui, se prolongaron y ampliaron los accesos y se creó un tercer carril de unos 400 metros hasta el enlace con la AP-9, con lo que se agiliza la circulación. La conselleira aprovechó su intervención para recordar otras inversiones que se realizan en el municipio de O Porriño y ascienden a 15 millones de euros.
Tanto ella como el alcalde, Raúl Francés, agradecieron a los vecinos la paciencia por las molestias causadas por los trabajos, que se alargaron más de los previsto debido a las dificultades técnicas que presentaron. Entre ellas, la cercanía a la subestación eléctrica de Fenosa, que obligó a trabajar en el enterramiento de algunas líneas o la ampliación del viaducto sobre el Louro.