El proceso concursal entra en la fase final tras el acuerdo con Caixanova

La Voz

VIGO

18 dic 2008 . Actualizado a las 02:00 h.

El proceso concursal del Celta está a punto de entrar en su fase definitiva. Desde el momento que se firme el acuerdo con el acreedor ordinario mayitario, el concurso enfilará su recta final con tres paradas. La primera, las impugnaciones que están en marcha; la segunda, la convocatoria de la junta de acreedores, y la tercera, la asamblea extraordinaria de accionistas encargada de aprobar la ampliación de capital para que mchos de los actuales acreedores conviertan la deuda que tienen pendiente en acciones. Si todo sigue su curso normal mediada la próxima primavera el proceso concursal debe ser historia. Se convertiría en uno de los concursos más rápidos de la historia en el ámbito deportivo.

La firma con Caixanova

La única duda es saber cuándo se procederá a estampar la firma, cuestión que podría demorarse incluso hasta principios de la próxima semana, pero el acuerdo entre el Celta y la entidad crediticia está cerrado desde hace días. Falta por conocer también la letra pequeña, aunque Mouriño ya ha comentado que el acuerdo es beneficioso para el club. La deuda con la caja del sur de Galicia asciende según el informe concursal a 23 millones de euros. Una vez que se firme necesita también el visto bueno de los administradores concursales.

Resolver las impugnaciones

A día de hoy puede ser el aspecto que más retrase el proceso. Al final han sido tres las empresas que han mostrado su disconformidad con la relación de acreedores. La única con cierta complicación es la de Seragua, la empresa concesionaria del agua que no aparecía en la relación de acreedores y que ahora reclama medio millón de euros. El club sigue indicando que no existe constancia de la deueda y que no la empresa no tiene razón. Las cantidades que reclama al Seguridad Social y Gasóleos Amigos son irrelevantes.

Junta de acreedores

Una vez solventadas las impugnaciones, el juez podrá proceder a la convocatoria y a la constitución de la junta de acreedores, en donde el Celta tiene que personarse como entidad concursada y en donde tienen derecho a voz y voto todos los acreedores ordinarios, no así para los subordinados. Para alcanzar un acuerdo se debe contar con el voto favorable del 50% de la masa de acreedores, asunto que está garantizo en este caso al existir un entente con Caixanova. Una vez firmado el acuerdo quedará levantada la intervención concursal en el club, aunque la supervisión del juez continuará mientras que el club no liquide todas sus deudas.

Convocatoria asamblea extraordinaria de accionistas

Con toda probabilidad en febrero serán convocados a una junta general extraordinaria los accionistas del Celta para someter a votación como único punto del orden del día la ampliación de capital con la posibilidad de concurrir mediante créditos participativos, convirtiendo deuda en acciones. Es una de las fórmulas que el Celta ha propuesto a sus acreedores para reducir deuda. Uno de ellos será Caixanova.

Cerrar con Hacienda

El club ha comentado en varias ocasiones que el convenio con Hacienda será el último en cerrarse, pero a estas alturas ya existe también un borrador de preacuerdo. La Agencia Tributaria tiene asegurado el cobro de 19 millones como deuda privilegiada y ahora resta por saber la cantidad de intereses y costas que tendrá que pagar el Celta como parte de la deuda ordinaria. El club entró en concurso debiéndole 33 millones al erario público, pero todo indica que obtendrá una suculenta rebaja por el concepto de intereses.