Tesoira se abre a los cachorros del diseño

Soledad Antón soledad.anton@lavoz.es

VIGO

12 nov 2008 . Actualizado a las 11:24 h.

Son los que faltan para saber qué joven diseñador de los diez que han llegado a la final se adjudicará la Tesoira de este año. En representación de la Xunta, que es la que organiza el certamen, Rubén Cela y Francisco Verea, director xeral de Xuventude y delegado de Igualdade, respectivamente, presentaron ayer en sociedad a los elegidos. Hasta el próximo día 20, de aquéllos apenas conocemos sus nombres. Y es que los modelos son secretos hasta que los contemple el jurado y desfilen por la pasarela.

Vigo es la ciudad con más representantes: Isabel Mastache, que presenta la colección Sputnik; Olalla Novoa (Pocket) y Alberto Neves (Comprensión-Explosión). Olalla, que tripite -«a ver si a la tercera va la vencida»-, es la veterana de Tesoira. El resto de los finalistas son Marcos Barra (Baiona), Eva Soto (Cambados), Mónica Bastón (Sanxenxo), Rocío Caramés (Verín), Paula Lages (Vilagarcía), Laura Ponce (Ourense) y Alba Vázquez (A Coruña).

Tesoira contempla asignación económica para los tres primeros clasificados, aunque lo mejor del premio no son los cheques de 3.000, 1.500 y 1.000 euros que esperan a las mejores colecciones, sino el escaparate que implica el certamen y, sobre todo, la posibilidad de acceder a sendas becas formativas en los talleres de Cristóbal Vidal, María Mariño y Pilar Bande.

Lo explicó muy bien Rubén Cela: «Isto é un trampolín», además de un punto de encuentro entre el sector empresarial y las nuevas promesas de la moda. Añadió que en momentos de recesión económica como los que vivimos, a los que el textil no es ajeno, resulta vital potenciar la capacidad creativa que distingue a Galicia, «campo no que somos moi competitivos».

Respecto al escaparate que supone para los concursantes, baste decir que el día de la gala suelen ser varios los empresarios que buscan acomodo en el patio de butacas del Centro Cultural Caixanova para ver de cerca lo primero que sale de la imaginación de los creadores recién salidos del horno.

El jurado encargado de valorar las propuestas lo forman Guillermo Gómez, responsable académico del Instituto de Tecnología y Diseño de Allariz; Dolores Dopico, directora del Centro de Diseño y Moda de Galicia; María del Mar Ciorraga, directora de Goymar, y los diseñadores Jorge Méndez, Cristóbal Vidal, María Mariño y Pilar Bande.

Desde hace unos años, El Corte Inglés se ha convertido en aliado de Tesoira. Pati Blanco, responsable de comunicación de la firma, explicó ayer que en cuanto se conozca el fallo del jurado, los trabajos ganadores de expondrán en los tres centros que tienen en Galicia. «Es nuestro pequeño grano de arena para impulsar la promoción de nuevos valores. La cantera es fructífera», dijo Blanco. Diseñadores. Los tres vigueses presentan propuestas bien diferentes. Olalla Novoa, la veterana, vuelve a intentarlo con una colección para hombres. Esta vez apuesta por lo urbano, cómodo y juvenil. Confiesa que le gusta más el diseño que la confección y que su vena artística se reveló bien pronto. «Desde niña me gustó dibujar. Hacía cómics a mi manera, en los que siempre había vestidos». En cuanto tuvo edad para no pincharse con la aguja, dibujaba y cosía. Sus modelos eran las muñecas.

Un poco más tarde le llegó la vocación a Isabel Mastache, que antes de intentar abrirse hueco en el mundo de la moda estudió Bellas Artes. «Lo que siempre me ha gustado es el tejido; crear volúmenes con él... La moda y el arte están muy relacionados», afirma. A Tesoira ha presentado una colección mixta (tres trajes de chico y dos de chica), para la que ha encontrado inspiración en los 50, recreando la estética de los zíngaros de la Europa del Este.

Alberto Neves es un diseñador gráfico que se ha pasado a la moda sin red. Comparte genes con Claudina Posada, costurera jefa de las más importantes casas de moda que tuvo Vigo hasta los 80. «Hacía trajes a medida y, por supuesto, alta costura de ceremonia; he tratado de fusionar ese mundo con obras gráficas». Alberto es un todoterreno; nuevo en esto del diseño, pero no inexperto. De hecho cuenta con tienda propia, Lola-B y ahora lo plancho, en la que vende sus creaciones.

El baionés Marcos Barra dio el salto a la moda desde Dirección y Administración de Empresas. Está a punto de rematar sus estudios. De hecho, dentro de dos semanas presenta el proyecto de fin de carrera, así es que estos días necesita cuatro manos para acabarlo todo. A Tesoira se presenta con una colección para hombre en la que la materia prima son mantas térmicas y fieltros, y en la que mezcla la sastrería con la ropa deportiva.