El Plan Xeral amplía hasta Rosalía de Castro el área de cautela arqueológica

VIGO

El nuevo catálogo está basado en un trabajo realizado Xulio Carballo, Javier Luaces y Cristina Toscano en 1998

13 ago 2008 . Actualizado a las 11:20 h.

Las grandes novedades aportadas por la arqueología en Vigo durante los últimos años tienen su reflejo en el nuevo Plan Xeral de Ordenación Municipal (PXOM). La principal aportación del texto urbanístico es la ampliación de la zona de cautela arqueológica, es decir, la zona donde se establecen una serie de medidas preventivas para salvaguardar el patrimonio arqueológico.

Si en el texto anterior se ceñía la cautela al espacio existente entre la calle Real, en el Casco Vello, y la calle Oporto, en el Areal, en el nuevo PXOM se amplía esta cautela hasta la futura confluencia de las calles Rosalía de Castro y García Barbón, en el solar donde en los últimos años se detectó una salina de grandes proporciones asociada a otros restos de diversas épocas históricas.

La medida originará la ralentización de cualquier obra que se quiera realizar en este espacio, pero asegurará un completo rastreo de cualquier vestigio del pasado.

El PXOM también ha visto actualizado su anterior catálogo en base a las conclusiones realizadas por los prestigiosos arqueólogos Xulio Carballo, Javier Luaces y Cristina Toscano en el año 1998. El trabajo consta de ciento cincuenta yacimientos arqueológicos y treinta y dos hallazgos aislados, que abarcan desde materiales paleolíticos hasta una fábrica de salazón del siglo XIX. El inventario incluye, como novedades respecto al anterior PXOM, las mámoas de Costa Freiría, Ferradouro, Chans dos Touciños, Chan do Labrador, O Vixiador y A Madroa.

Asimismo, se ha incorporado al documento la declaración individual de Ben de Interese Cultura correspondiente a los petroglifos de la Devesa do Fragoselo y del Outeiro do Castro, en la parroquia de Coruxo, y el petroglifo de Gondosende, en Teis.

En el PXOM también se corrigieron algunos elementos, como el yacimiento de la villa romana de Punta Borralleiro, que ahora es área de protección de elementos arqueológicos, o el polémico yacimiento de Torres Padín que será zona de espacio libre y zona verde en su integridad, aunque se permitirán las obras de enlace con el barrio de Teis.

En Cotogrande, se suprimió un vial previsto para evitar la destrucción de dos mámoas y un petroglifo. Un conjunto de seis petroglifos ubicados en Fragoselo, parroquia de Coruxo, también pasan ahora a estar clasificados como Solo Rústico de Especial Protección de Patrimonio Arqueolóxico e Forestal.

Marqués de Valterra

El yacimiento romano ubicado entre las calles de Marqués de Valterra y de Juan Ramón Jiménez se suprimió la construcción de una torre de veinte plantas, que se reduce a cinco plantas «polo que as solucións de cimentación poden resolverse por medio de fórmulas convencionais menos agresivas co xacemento». Además, el edificio que se construya deberá cumplir las determinaciones de la Dirección Xeral de Patrimonio Cultural.

Por su parte, el castro de Monte da Mina se verá afectado por la construcción de vial previsto para aminorar el impacto del tráfico rodado sobre la iglesia románica de Castrelos.