Horacio Gómez llevó al club vigués en el 2001 a una ampliación de casi seis millones de euros

La Voz

VIGO

01 nov 2007 . Actualizado a las 02:00 h.

El Celta se enfrentaría a su segunda ampliación de capital en este siglo. Horacio Gómez, ex presidente del Celta, propuso una ampliación en el 2001 que llevó al Celta a una ampliación en torno a 920 millones de las antiguas pesetas, o lo que es lo mismo cercana a los actuales seis millones de euros. El club vigués pasó a tener un capital social a la conclusión de esa ampliación de 1.520 millones de pesetas, unos nueve millones de euros. Quedaron sin suscribir en su día cerca de dos millones de euros en acciones tras las tres fases del proceso de ampliación.

Los movimientos accionariales de entonces dieron el control del club a Horacio Gómez y a sus allegados que tenían más del 50 por ciento de las acciones. El ex presidente céltico manejaba el 39 por ciento que casi en su totalidad le vendió al actual presidente, Carlos Mouriño hace un año y medio.

La ampliación actual no puede ser para que Mouriño tenga el control absoluto del club, como sucedió entonces, porque parece que ya lo tiene. Gómez había aclarado en su día que no era su pretensión pero el caso fue duplicó el porcentaje de acciones que controlaba antes de la ampliación.

Grupo Opositor

Gómez tuvo un claro grupo opositor en su día a esta ampliación que encabezaba el ex directivo del club, Javier Alonso. Habrá que ver como reaccionan los abonados del Celta ahora a la petición de Mouriño. El portavoz del grupo opositor a aquel consejo de administración denominado Equipo Celeste se mostraba convencido de que iban a lograr una resolución judicial favorable a sus planteamiento que era el de anular el proceso de ampliación. A pesar de las múltiples demandas, el proceso no se interrumpió.

Gómez aseguró después de que los culpables de que no se completase la ampliación hasta donde pretendían habían sido los opositores. Anunció una querella por parte del club en la que iba a pedir daños y perjuicios. De todo esto, nunca más se supo.

Gómez acusó a los compradores de acciones de Equipo Celeste de pretender comprarlas para vendérselas a gente de fuera de Vigo. El temor a un Piterman de la vida, hizo que los aficionados célticos arrimasen el hombro y buscasen ser parte del club.

Mouriño ahora podrá controlar más acciones del Celta, piensa meter dinero, y disponer de liquidez en caja. De una sola tirada equilibrará una situación que desde fuera parece complicada. La situación real económica del club, como hace unos días reconoció su vicepresidente, es complicada. Este ampliación puede tener mucho que ver con ese agujero.