La Mirilla
23 feb 2006 . Actualizado a las 06:00 h.Cada 23 de febrero se repite el ritual. Aunque en los últimos nueve la cita es más nostálgica, fruto de la ausencia del protagonista principal, Laxeiro. El pintor de Lalín (23-2-1908) instauró en su día la tradición de reunir a un grupo de amigos en el restaurante Puesto Piloto. Cuando falleció, en el verano de 1996, aquéllos (los amigos, digo) decidieron mantener la tradición. Y el menú: lacón con grelos y orejas de carnaval. Lo cierto es que la cita, más que mantenerse fue creciendo. Cada año hay que añadir una mesa. Sobre todo desde que la Fundación Laxeiro acordó crear un premio con el nombre del pintor. En esta ocasión el destinatario ha sido Xaime Illa Couto «pola súa inestimable contribución ó fotalecemento da nosa cultura no plano intelectural, profesional e humano», en palabras del Patronato. Illa Couto no pudo acudir a recoger el premio, pero sí mandó acuse de recibo a través de Antonio Montero. Éste explicó que Illa le había pedido que dijese que el galardón le proporcionaba dos motivos de ledicia. El primero, que se reconociera su trayectoria cultural; y el segundo que llevara el nombre del que fue uno de sus mejores amigos. A la hora de los discursos, no faltó una breve pincelada sobre la vida y la obra del premiado, en la que, además de recordar que, junto con Francisco Fernández del Riego, fundó la editorial Galaxia en 1950, quedó claro que Xaime «sempre fixo da discusión un modo de convivencia, unha ferramenta de enriquecemento e un arma para con-vencer, é dicir, para que todos os que participan na discusión, saian gañando». Qué pena que no copien unos cuantos. Entre los más de 50 asistentes a la comida estaban Corina Porro, Ramón Castromil, Luis María Caruncho, Bieito Ledo, Luis García Mañá, Javier Buján, Carlos García Suárez, Francisca Canal... También asistieron Fidel Illa Couto y su hija Blanca en representación de la familia del galardonado. Y en el reservado de al lado... Pues otra comida. En este caso sin publicitar y con todas las trazas de una despedia. Ya saben, cuando un amigo se va... Porque el lugar más preeminente de la mesa lo ocupaba Jesús Souto, presidente del Tribunal Superior de Xusticia (in itinere), rodeado de un grupo de jueces. Casi seguro que será uno de sus últimos encuentros amistoso-profesionales antes de hacer las maletas con destino al Supremo. El mejor artículo sobre procesado de señales Tan bueno que tuvo premio. Lleva la firma de Roberto López Valcarce, profesor de Teleco en Vigo. La cualificación se la ha puesto el Instituto of Electronic and Electric Engineers que, para los investigadores viene a ser como el jurado del Pulitzer para los periodistas. Roberto López está sumergido en el apasionante estudio de las modificaciones que se producen en los canales de comunicación cuando se aparece una señal. ¡Qué cosas!