Trescientas familias viguesas se apuntan al consumo ecológico

VIGO

GUSTAVO RIVAS

Reportaje | Una alimentación responsable La cooperativa sin ánimo de lucro Árbore proporciona más de mil productos biológicos y procedentes del comercio justo y promueve una federación gallega

03 ene 2006 . Actualizado a las 06:00 h.

?stá en el polo opuesto a las enchentas navideñas, esas que tantos arrepentidos dejan por estas fechas. Se llama Árbore y es una cooperativa sin ánimo de lucro que sólo consume productos de cultivo ecológico y biológico, frescos y envasados. Más de trescientas familias de Vigo ya se han apuntado y aspiran a crear una federación gallega. Su tienda está en la calle de Pérez Bellas, junto al centro informático de Caixanova, y pone a disposición de socios y no socios más de mil productos diferentes. De todo excepto carne, pescado y derivados, pues son vegetarianos. Los alimentos procedentes de la eurorregión Galicia-Norte de Portugal tienen preferencia sobre los del resto de la península y éstos sobre los de otros lugares del mundo. Pero en Árbore también tiene su parte dedicada al comercio justo para favorecer al tercer mundo. Lácteos de Lugo, aceite de Jaén y de Tras Os Montes, chocolate africano, café nicaraguense y cubano... La lista es muy variada e incluye verduras, pastas, cereales, algas, plantas medicinales, panes, arroces e incluso productos de limpieza e higiene personal que se guían siempre por principios irrenunciables como el reciclaje, el ahorro energético y la economía social. «¿Que son caros? A pesar de que os nosos productos valen un pouco máis que os do supermercado, eu diría que resultan máis ben baratos», dice Manuel Garrido. Él y otras veinte personas procedentes de distintos movimientos sociales lanzaron la iniciativa hace un lustro. Lograron abrir un centro distribuidos y a partir de ahí fueron creciendo poco a poco. Actualmente, tienen a cuatro personas con contratos en regla. «A nosa implicación vai dirixida ó consumo responsable e consciente, queremos elevar o nivel de conciencia sobre a producción química na agricultura, a defensa da biodiversidade, o cambio climático e a falta de valores éticos das multinacionais», explica Garrido. Galicia, por sus microclimas, tiene las mejores condiciones para que haya cada vez este tipo de productos, esos que ya reconoce el sello del Consello Regulador da Agricultura Ecolóxica Galega (Craega). Existen varios núcleos de consumo, pero no cooperativas como la de Vigo, de ahí que en Árbore estén promoviendo iniciativas similares en otras ciudades. Por otra parte, también han hecho un esfuerzo para estar presentes en el área metropolitana (acuden a ferias de los concellos). Los socios disponen de una huerta en Valadares para experimentar técnicas de agricultura ecológica.