HEMEROTECA En el pabellón de Travesas luchaban contra el tabaco y no querían espectáculos

Gerardo G. Martín VIGO

VIGO

ÓSCAR VÁZQUEZ

SUCEDIÓ EN 1980

01 sep 2005 . Actualizado a las 07:00 h.

Donde el difunto Leri tuviera mando, las medidas eran enérgicas y no se admitían bromas. Empezó, hace ahora 25 años, por aconsejar no fumar en el pabellón de As Travesas, que entonces recibía el nombre de Centro Deportivo Municipal, que fue el que le puso el alcalde Rafael J. Portanet cuando lo construyó, en los años sesenta del siglo pasado. Antonio Nieto Figueroa, que era vicepresidente del Centro, lo tenía claro. Si usuarios y espectadores no tenían en cuenta los enormes letreros que aconsejaban dar la espalda al humo, se pasaría a la segunda iniciativa: a la prohibición absoluta de fumar en aquella instalación deportiva. Algún cartelón, enorme, rezaba así: «Fumador, déjalo para después». Otra batalla de Leri en aquellos tiempos era la del respeto a los deportistas de cualquier categoría. En definitiva, el Centro se había construído para ellos. El que fue popular concejal daba por hecho que él no consentiría ni una sola vez que una folklórica o un cantante de rock viniera a ocupar el pabellón de As Travesas si había una solicitud previa de la instalación por cualquier club. «Esa -decía en alusión a Lola Flores-, igual que todos los demás, sólo actuará en el pabellón cuando éste se encuentre completamente libre». A ver qué pensaba en campaña electoral.