?mén de los proyectos de investigación que cada año aprueba el CSIC con la aportación comunitaria, las ampliaciones del Instituto de Investigaciones Marinas de Bouzas y del Oceanográfico de Saiáns y las construcciones del Centro Tecnológico del Mar (Cetmar) y del Centro de Apoyo Científico y Tecnológico a la Investigación (Cacti) han salido adelante con fondos de distintos programas de la UE. Buena parte de los avances que ha hecho la ciudad en el campo de la investigación en la última década no son ajenos al hecho europeo. Al contrario. Incluso el buque oceanográfico Mitylus se pagó a través del Feder en la época en que Uxío Labarta dirigió el Instituto de Investigaciones Marinas. Campus La Universidad también se ha aprovechado. Además de las aportaciones para ampliar el campus (circunvalación) y de las intervenciones en Peritos, Derecho y Económicas de la Consellería de Educación, la institución académica ha conseguido financiación de Bruselas para crear la Estación de Ciencias Marinas en la isla de Toralla y ha conectado todas sus escuelas en banda ancha y con tecnología inalámbrica. El Consorcio de la Zona Franca puso en marcha el programa Gaelic de nuevas tecnologías y el Centro de Iniciativas Empresariales (CEIP).