Olas de más cuatro metros cubrieron fincas y paseos en Canido y Samil

Marco Groba VIGO

VIGO

JOSÉ A.BEIRO

Centenares de surfistas disfrutaron del mar mientras los mercantes se refugiaban en Cíes

21 oct 2002 . Actualizado a las 07:00 h.

El fuerte temporal en la mar, con vientos que rozaron ayer los 100 kilómetros por hora, mantuvo ayer amarrada a toda la flota de bajura del sur de la provincia y provocó inundaciones en paseos marítimos y fincas particulares. Centenares de surfistas disfrutaron durante todo el día de ayer en las playas de Samil y O Bao de olas de hasta cuatro metros de altura. Coincidiendo con una de las pleamares más altas del año, sobre las cinco de la tarde las olas cubrieron el paseo de Samil. Vecinos de la isla de Toralla tuvieron a esa hora dificultades en atravesar el puente. Algunos esperaron a que bajase la marea por temor a que uno de los golpes de mar que atravesaban la estructura arrastrase su coche. El mar también provocó a esa hora inundaciones en domicilios y fincas particulares en el litoral de Coruxo. Durante toda la tarde los pescadores de Canido estuvieron sacando del agua las barcas más pequeñas por temor a que se fueran a pique. Aunque la naviera Mar de Ons no suspendió el transporte regular a Cangas y Moaña, numerosos viajeros optaron por desplazarse por carretera entre Vigo y O Morrazo debido al mal estado de la mar. Además, cuatro grandes mercantes permanecen fondeados al abrigo de las islas Cíes mientras esperan a que remita el temporal. El viento no provocó ayer daños de consideración en la ciudad, aunque dejó un paisaje otoñal, con parques y avenidas repletos de hojas y ramas caídas. Sin embargo, el domingo sí se produjeron en Vigo y su área metropolitana caídas de árboles, muros, antenas, vallas de obra y contenedores. La estación meteorológica del puerto registró el domingo una racha máxima de 43,3 nudos (89,35 kilómetros por hora) a las 8.40 de la mañana, coincidiendo con la primera entrada del frente lluvioso. Sin embargo, tanto ayer como anteayer cayó menos agua de la que se esperaba. Entre las ocho de la mañana y las tres de la tarde sólo se registraron 15,5 litros por metro cuadrado. Tampoco llovió mucho ayer. El agua cayó entre arco iris, en aguaceros tan fuertes como breves. Aeropuerto sin problemas El aeropuerto de Peinador no se vio afectado en los dos últimos días por las malas condiciones meteorológicas.