El Servicio de Atención Familar (SAF) comprueba las denuncias para garantizar la protección del menor El inspector jefe del Servicio de Atención Familiar (SAF) del Grupo de Menores (GRUME) de la Polícia Nacional, Carlos Flórez, animó ayer a los docentes a denunciar posibles casos de maltrato a menores en el transcurso de las jornadas sobre conflictividad escolar que se celebraron en la Casa del Mar. Flórez indicó que el papel de los profesores en la detección de estos casos es fundamental porque conviven mucho con los menores y pueden apreciar conductas extrañas de miedo y aislamiento o señales físicas de maltrato.
16 dic 2000 . Actualizado a las 06:00 h.El inspector jefe del SAF afirmó que la protección del menor es un deber de todos, por eso, «desde el momento en que se tienen sospechas» de que un niño es víctima de malos tratos o de algún delito contra la libertad sexual, se debe poner en conocimiento de la Policía. Carlos Flórez explicó que el SAF, a partir de la denuncia, se encarga de comprobar si el menor «se encuentra en una situación de riesgo» y de presentar las pruebas pertinentes ante la justicia. Por otra parte, aclaró que la Policía mantiene en el anonimato la identidad del denunciante, aunque en algunos casos se requiere su testimonio ante el juez. Por otra parte, el inspector jefe del SAF explicó que, cuando se demuestra que ha habido maltrato, es la Xunta la que tiene competencias para proteger al menor, «que es apartado de esa esfera de malos tratos». Flórez comentó que el Grupo de Menores lleva en Vigo desde 1993 y añadió que el municipio está «por debajo de la media nacional» en casos de violencia contra menores y ejercida por menores. «Las peleas entre pandillas, robos y desperfectos del mobiliario urbano son los problemas más frecuentes», añadió refiriéndose a la conflictividad juvenil.