Con cinco refuerzos, trece jugadores que siguen y dos cedidos que retornan, pero no cuentan, el nuevo proyecto del equipo coruñés avanza a buen ritmo
11 jul 2022 . Actualizado a las 10:42 h.A ocho días de la pretemporada que comenzará el próximo día 18, ya se vislumbra el nuevo proyecto del Deportivo. Continuidad e ilusiones renovadas maridan en una plantilla que se cocina desde el mismo criterio principal de la temporada pasada: un vestuario largo, integrado por jugadores forjados en la categoría y con muchas ganas de crecer de la mano del club, que parte con una única premisa: subir de categoría. Trece futbolistas del equipo que este lunes hace justo un mes cayó en la final por el ascenso disponen de contrato, a los que hay que añadir siete llegadas, entre las que se incluyen los cinco refuerzos ya anunciados y dos caras conocidas, los retornados Valín y Gandoy, que jugaron cedidos el pasado curso y no cuentan, pero cuya vinculación sigue en vigor hasta el 2023.
La portería destaca como la única línea completa. A Mackay y el novel Brea se ha unido el retorno de Edu Sousa, en una situación que repite circunstancias vividas la pasada campaña con el jugador de padre escocés. Es otro veterano (31 años) con el sello de Abegondo que nunca había debutado en las filas del primer equipo, pero ahora regresa a partir de una contrastada hoja de servicios con 224 partidos en la tercera categoría.
En la defensa, en cambio, quedan varias incógnitas por resolver: tras confirmarse el retorno de Antoñito, está por ver la continuidad o no de Granero, pese a que cumplió las condiciones para ampliar otro año su contrato; y quién será el cuarto central: un nuevo fichaje, o el fabrilista Barcia. Siguen los centrales titulares del pasado curso, Lapeña y un Jaime al que se ha premiado con dos años más de vínculo, al igual que Trilli, en plena recuperación, y Héctor, baza preferida para el lateral zurdo.
El mediocampo cuenta con dos nuevas piezas: Isi Gómez, un menudo mediocentro quien viene de jugar 30 partidos en el Badajoz, y Olabe, jugador de calidad que llevaba las cuatro últimas temporadas en Segunda. Los nuevos mimbres aportan alternativas en la pizarra y un perfil más ofensivo que los conocidos Bergantiños y Villares. La vuelta del canterano Gandoy, con un año más de contrato, no supone cambio alguno en su consideración como elemento prescindible del nuevo proyecto. Tras 21 partidos en el Coruxo, sigue sin entrar en los planes del equipo.
El ataque, a la espera de un tercer delantero y el carril izquierdo
Víctor Narro y Gorka Santamaría se convierten en los dos principales movimientos de la vanguardia deportivista. Pero no serán los únicos. El exjugador del filial del Valladolid se convierte en una alternativa para las dos bandas, aunque durante su última etapa en Pucela se le vio más por la derecha, justo donde Quiles ha destacado como seguro de gol. Por si fuera poco, esta es precisamente la misma banda por la que se mueve otro jugador con contrato, pero que poco viene de aportar a los planes blanquiazules. Es el caso de Carlos Doncel.
El abarrote de piezas en el extremo derecho supone que Santamaría se convierta por ahora en el único delantero centro puro de la plantilla. El exjugador del Badajoz, autor de 15 goles en la campaña recién finalizada, viene a A Coruña a convertirse en referencia atacante, pero no será la única. El traspaso de Noel abre un hueco que se cubrirá con la muy probable llegada de otro jugador. A la espera de la posible vuelta de Mario Soriano, Yeremay, con preferencia por el extremo zurdo, se convierte en el único jugador específico para esta demarcación.
Un puñado de jóvenes canteranos, a la expectativa de un verano para soñar
El ejemplo de Trilli está muy fresco. Como juvenil deslumbró el pasado verano hasta llegar a ser titular en la primera jornada liguera, tras adelantar en las preferencias a un rutilante fichaje (Alberto Benito), un canterano consolidado, pero lastrado por una lesión (Valín), y otras alternativas (Lapeña, el propio Víctor García o el fabrilista Guerrero). ¿Por qué no se puede dar el caso de otro canterano que tire abajo la puerta del primer equipo? Con esta ilusión partirán perlas como Barcia (central, 19 años), Brais Val (mediocentro, 19 años), Jairo (mediocentro, 18 años), Mella (extremo, 17 años) o Martín Ochoa (delantero, 17 años), a los que el mercado, las necesidades y las pruebas les pueden abrir las puertas de la Primera RFEF.