La marea blanquiazul, en la plaza de Cuatro Caminos de A Coruña hasta el final

Nuria Guillermo
Nuria Guillermo A CORUÑA

TORRE DE MARATHÓN

Los aficionados que siguieron el partido desde la pantalla gigante que colocó el Ayuntamiento apoyaron al equipo durante los 120 minutos del partido

12 jun 2022 . Actualizado a las 16:31 h.

Es poco común pasear por el centro de A Coruña un sábado y encontrar las calles desiertas. Durante la tarde de este sábado, en cambio, muchas zonas de la ciudad registraron menos visitantes de lo que es habitual. Pero esto no se debió a que los coruñeses decidiesen quedarse en casa. Unos acudieron a Riazor y otros se concentraron en el gran escenario de las celebraciones deportivistas: la plaza de Cuatro Caminos.

Durante la hora previa al arranque del encuentro contra el Albacete, deportivistas ataviados con camisetas, banderas y bufandas cubrieron de blanquiazul el espacio habilitado para el seguimiento del partido y, bajo un cielo soleado, animaron con cánticos la espera. Desde el pitido inicial, la afición vivió cada jugada con intensidad, celebrando los aciertos y protestando cuando la retransmisión fallaba. El gol de Mario Soriano fue celebrado con gritos y aplausos por parte de la afición.

Apoyo hasta el último minuto

Durante la segunda parte del partido, las nubes comenzaron a aparecer en el cielo coruñés a la vez que el partido empezaba a complicarse para el Deportivo. Tras el primer gol del Albacete, la afición continuó animando al equipo y mostrando su esperanza por lograr el ascenso. Los asistentes celebraron el final del tiempo reglamentario y se prepararon para los treinta minutos de prórroga.

El segundo gol del equipo visitante enmudeció a la afición durante unos instantes, pero no tardaron en seguir animando al Dépor con la misma intensidad. No pararon de apoyar al equipo durante los 7 minutos que transcurrieron entre el gol de Jordi Sánchez hasta que el colegiado Fuentes Molina pitó el final del partido. Tras la finalización del encuentro, entre lamentos, caras largas y lágrimas por parte de algunos de los asistentes, los aficionados comenzaron a replegarse y abandonar la plaza poco a poco. El ambiente festivo se transformó en urgencia por abandonar el lugar.

No cabe duda de que los aficionados se volcaron con el Dépor en el play-off de ascenso a la categoría de plata del fútbol español. Los deportivistas lograron una asistencia de récord a un Riazor que colgó el cartel de «completo» veinte minutos después de poner las entradas a disposición del público general, recibieron a los jugadores a su llegada al estadio abarrotando la avenida Manuel Murguía y cubrieron las calles de la ciudad de blanquiazul incluso los días previos al partido.

La Policía Local cifró en cerca de 4.000 personas el número de deportivistas que siguieron el partido desde la plaza de Cuatro Caminos.