Rubén de la Barrera niega que hubiera negociado con el Las Palmas

TORRE DE MARATHÓN

CESAR QUIAN

El entrenador rebate las acusaciones del Deportivo y admite que se reunió en A Coruña con Luis Helguera, director deportivo del club canario, pero matiza que «no hubo una oferta y, por lo tanto, tampoco una contraoferta» por su parte

20 may 2021 . Actualizado a las 08:59 h.

Dolido y sorprendido tanto por la ruptura de las negociaciones por parte del Deportivo como por los argumentos esgrimidos por el club para hacerlo, Rubén de la Barrera guarda silencio. No quiere entrar en una guerra con la entidad blanquiazul, «que está por encima de las personas», tal y como apuntan desde su entorno, pero sí que quiere defenderse de algunas acusaciones vertidas desde la plaza de Pontevedra. Su contrato, todavía en vigor, se lo impide.

Fuentes cercanas al entrenador aseguran que «en ningún momento hubo una negociación con el Las Palmas», que únicamente hubo «una reunión con Luis Helguera (el director deportivo del club canario se desplazó hasta A Coruña para entrevistarse con él) en la que no hubo una oferta y, por lo tanto, tampoco una contraoferta» por su parte. Asimismo, aseguran que el director general del Deportivo, David Villasuso, estaba avisado de que ese encuentro se iba a producir.

«Una vez que Luis Helguera, con quien Rubén mantiene una muy buena relación profesional, lo llama para decirle si se pueden ver, Rubén informa al Deportivo. Dice que él siempre ha atendido a todo el mundo y que quiere hacer lo mismo en esta ocasión. No encuentra impedimento alguno por parte de la entidad blanquiazul. En esa reunión del jueves, el director deportivo del Las Palmas le explica el ambicioso proyecto que tiene para la próxima temporada y le traslada que su perfil resulta interesante dentro de esa idea. Sin embargo, Rubén le deja claro que está en el Deportivo, un club que significa mucho, tanto en el mundo del fútbol como para él a nivel personal como coruñés. Y remarca que tiene una opción de seguir en A Coruña, que implica varios años y cierta responsabilidad en el proyecto. Él le agradece su visita, y le aclara que su intención es, si llega a un acuerdo, seguir en A Coruña», explican fuentes próximas al técnico coruñés.

El entorno de De la Barrera remarca que de esa reunión no salieron ninguna oferta ni ninguna propuesta. «Al día siguiente, viernes, Rubén traslada a Villasuso el contenido de la conversación y le pide que le presente ya una oferta concreta para el lunes reunirse, negociar y, para bien o para mal, cerrar con el Deportivo».

De este modo, siempre según el entorno de De la Barrera, el Dépor y el entrenador quedan emplazados para negociar el lunes. «Hasta ese momento, hay que destacar que Rubén no tenía una oferta sobre la mesa del Deportivo. Llevaban tiempo reuniéndose semanalmente para hablar de la temporada en curso e ir perfilando la siguiente. Le habían dicho que querían que siguiera dos años con opción de uno más y que tendría más peso en el club. Sin embargo, no le habían trasladado una propuesta económica. Que eso, también hay que decirlo, nunca hubiera sido un imipedimento, porque si fuera por dinero, él se iría al extranjero. No se mueve por el dinero ni por la categoría. Él quería seguir entrenando al Deportivo, y así se lo trasladó al director general. Además, quien diga que él o cualquiera de su staff tenía una propuesta económica, miente». 

El encuentro del viernes entre Villasuso y De la Barrera finaliza cordialmente, a juicio del entrenador. «Hablan de la pretemporada siguiente, de la posibilidad de tener un campo en Abegondo donde protegerse un día más a la semana, de Riazor... Sin embargo, aunque quedan en hablar el lunes y cerrarlo todo, el director general le sorprende diciéndole que tiene una información que él desconoce, que procede del presidente del Las Palmas, que le dice que él va a ser el elegido, pero eso no es cierto. Días después, parece como si estuviese construyendo la decisión del sábado», relata el entorno del entrenador. Durante las conversaciones de las semanas anteriores, De la Barrera había adelantado, también, su intención de seguir contando con sus dos colaboradores de confianza, Julio Hernando y Secho, e incorporar un tercer técnico, además del equipo de trabajo que ya le brinda el propio club. 

Así las cosas, el pasado sábado «Rubén recibe una llamada de David (Villasuso), en la que le dice que el día anterior hubo una reunión del consejo y que se decidió retirarle la oferta de renovación. Pero es que esa oferta no existía, por otra parte».

Todavía se produjo un último intento por parte del entrenador, según explica su entorno: «El lunes, como habían quedado en hablar, le manda un mensaje a Villasuso y le pregunta si se queda con lo del viernes o con lo del sábado. Y este le responde con un wasap diciendo que se quede con lo del sábado, así que queda la oferta retirada y rotas las negociaciones. Y ahí termina todo».

De la Barrera lamenta la situación, no poder seguir vinculado al club y, siempre dejando claro que su enfado no es con el Deportivo, al que nunca criticará ni intentará debilitar. Según sus próximos, no consiente que «nadie ponga en duda su grado de compromiso, que demostró desde el primer día, aceptando incluso una propuesta en enero que no aceptaría en cualquier otro club».

Dos versiones de una negociación con varios puntos de desencuentro

Tanto Rubén de la Barrera como el Deportivo coinciden en que hasta la pasada semana su relación era idílica. El entrenador se reunía periódicamente con los integrantes de la dirección deportiva y el director general para hablar del presente y, sobre todo, del futuro. Había feeling. El coruñés era el elegido para entrenar la próxima temporada y él lo sabía. Parecía difícil que pudiera haber problema para cerrar un contrato de media duración que ambas partes deseaban firmar.

Sin embargo, el interés del Las Palmas acabó con todo. A partir de ahí unas horas de cuasi thriller político en las que las partes no se ponen de acuerdo con la versión.

Mientras el Deportivo asegura que el técnico que dirigió este ejercicio al equipo negoció con el club canario y que incluso, tras recibir una primera propuesta, hizo una contraoferta que, supuestamente, iba a ser respondida durante el fin de semana, el entrenador lo niega. Insiste por activa y por pasiva en que no hubo ningún tipo de negociación. Que solo escuchó a Luis Helguera, director deportivo del Las Palmas, y que no pudo haber contraoferta, porque en ningún momento hubo propuesta de los canarios.

Otro punto de desencuentro, según revelan fuentes cercanas al técnico, está en que aseguran que David Villasuso llegó a decirle a Rubén de la Barrera que manejaba información, supuestamente proveniente de Miguel Ángel Ramírez (presidente del Las Palmas) que indicaba que el puesto iba a ser seguro para el gallego. Este no solo niega tal posibilidad sino que se remite a la actualidad en la que parece estar más próxima la renovación de Pepe Mel que la contratación de un nuevo técnico. Sea Rubén De la Barrera, sea cualquier otro.

Yago Iglesias, Borja Jiménez y Julián Calero, terna para el banquillo

Tres son los hombres que a día de hoy figuran en los primeros puestos de la lista de entrenadores pretendidos por el Deportivo. Un ribeirense, un abulense y un madrileño. Yago Iglesias, Borja Jiménez y Julián Calero son los tres técnicos que más chance tienen en la actualidad de cubrir la vacante que deja Rubén de la Barrera en el banquillo de Riazor.

Yago está libre después de cinco temporadas en el Compostela, al que condujo a la Segunda División B. En el pasado ejercicio destacó por haber conseguido hacer jugar muy bien al fútbol a un equipo con un presupuesto más que modesto. Incluso ilusionó durante algún tiempo con poder meterlo en el grupo de la lucha por el ascenso, aunque finalmente no logró y tampoco la permanencia en Primera RFEF, algo que no empaña su buen trabajo.

Borja Jiménez es un entrenador con experiencia en subir a equipos a Segunda División. Lo hizo en la temporada 2018-2019 con el Mirandés y repitió en la 2019-2020 con el Cartagena. Entre ambas experiencias trabajó un año en Grecia en el Asteras Trípoli, conjunto de la máxima categoría del fútbol heleno. Esta pasada temporada la inició en el Cartagena, pero fue destituido en la jornada 18 tras quedar apeado de la Copa al perder en Pontevedra.

Según él mismo se definía en una entrevista a Marca tras ascender al Cartagena, es un técnico al que le gusta el fútbol de posición, pero se adapta a los jugadores.

«Tengo una idea muy marcada de cómo me gusta el fútbol, desde el juego posicional, desde ser muy dominadores, desde defender con mucha altura lejos del área... Pero va a depender un poco de la plantilla que tengamos. Siempre hay que adaptarse a los jugadores que uno tenga. Tenemos también muy claro que este año no vamos a tener los mejores jugadores de la categoría, lo que no te va a permitir ser tan dominador, pero utilizaremos nuestras armas para intentar serlo».

El tercero de los candidatos es Julián Calero. En caso de ser el elegido, su contratación no podría producirse hasta la próxima semana, pues se encuentra disputando el play-off de ascenso a Segunda con el Burgos.

Con una amplia trayectoria en el fútbol madrileño (incluidas las categorías inferiores del Atlético y el Real), fue ayudante de Fernando Hierro en la Copa del Mundo del 2018. No es la primera vez que Calero está en la agenda blanquiazul. Albert Gil ya lo quiso fichar para el Fabril hace 3 temporadas. Finalmente, el club prefirió una apuesta gallega y contrató a Tito Ramallo.