Las consecuencias del covid han supuesto la pérdida de 200.000 euros, un tercio del presupuesto del equipo coruñés
07 may 2021 . Actualizado a las 05:00 h.El Deportivo Liceo está a punto de cerrar un año convulso. Las circunstancias provocadas por el covid-19 obligaron a rehacer agendas y sobre todo presupuestos. Como muchos otros sectores, el deportivo también ha tenido que ajustar sus carteras para sobrevivir a la pandemia.
La entidad coruñesa, con las cuentas del curso todavía por cerrar, estima unas pérdidas de cerca de 200.000 euros sobre un presupuesto de 600.000. Cifras nada desdeñables, pero sí lejos de los grandes equipos europeos a los que, sin embargo, el conjunto verdiblanco planta cara.
La ausencia de una campaña de socios al uso por parte del Deportivo, dejó al Liceo sin ingresar los cinco euros correspondientes a cada socio que aunaba las dos entidades, también el fin del convenio con Vueling o la ausencia de público en el Palacio son algunos de los motivos de la pérdida sustancial que asumió el club dirigido por Daniel Echeverría. Precisamente, con la llegada de la nueva directiva, en noviembre del 2018, el consejo se vio obligado a asumir un déficit económico de cerca de 340.000 euros que todavía sigue abonando a día de hoy.
Con el gasto en salarios del primer equipo consumiendo más de un cuarto del presupuesto total de la entidad, la plantilla también asumió su parte. La suspensión de la pasada temporada repercutió sobre la actual y los jugadores aceptaron una bajada salarial del 20 %. Esta cuenta de gastos se ve incrementada con los generados por la propia competición, ascendiendo a casi 700.000 euros y dejando desequilibrado el debe y el haber. Una situación que se ve solventada con la ayuda de las administraciones y el apoyo de Hockey Global. Una economía que se aleja de la gran campaña del equipo sobre la pista.
Josep Lamas reclama 25.000 euros de primas
El pasado sigue presente en el club coruñés. Al menos en términos económicos. El Deportivo Liceo sigue abonando deudas a jugadores que han pasado por el club y que forman parte de la deuda adquirida del consejo saliente en el 2018. En la cuenta del debe del equipo todavía figura Josep Lamas, hijo del anterior dirigente de la entidad verdiblanca, Eduardo Lamas. El Liceo le abona unas primas correspondientes al 2009 de 25.000 euros y cuyo pago se extiende hasta finales del 2022.
También el actual jugador del Oliveirense, Jordi Bargalló. El motivo son también unas primas no abonadas y que suponen un gasto mensual para la entidad. Por último, el actual portero del Oporto, Xavier Mailán, aparece en la cuenta de deudas. Dejó de prestar sus servicios al Liceo en el 2019, pero aún así seguirá costando dinero a la entidad hasta el 2026.