El Deportivo paga en puntos su pérdida de eficacia en las áreas

TORRE DE MARATHÓN

Uche Agbo chuta durante un entrenamiento en Abegondo
Uche Agbo chuta durante un entrenamiento en Abegondo CESAR QUIAN

Necesita más ocasiones para marcar y encaja con mayor facilidad

04 mar 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

La solvencia defensiva empezó a flaquear hace una vuelta. El lastre de la falta de puntería tardó una semana más en radicalizarse. La estadística de remates partido a partido refleja la escasez en ambas áreas, pero sirve también para retratar cómo el problema se ha ido agudizando.

Si es cierto que el Deportivo ha dado muestras de alguna mejoría en su manejo del cuero en torno a la medular, esta no se ha traducido en las zonas en las que los partidos se desequilibran. En el arranque del curso blanquiazul las sensaciones enturbiaron la fiabilidad matemática. Durante esa racha de siete encuentros sin derrota que se consumió en el derbi ante el filial celeste, los entonces dirigidos por Fernando Vázquez convirtieron en quince puntos sus seis goles a favor y lo hicieron a fuerza de recibir poco: apenas dos tantos en contra.

La media docena de dianas fue el producto de 19 disparos a puerta; más de la mitad, agrupados en los ocho días que unieron las citas con el Unionistas y el Coruxo. En el tramo que fue entre la inauguración del campeonato y la visita a Pasarón, al conjunto coruñés le chutaron catorce veces entre los tres palos, una media de dos por encuentro. Para marcar necesitaba probar tres veces al meta contrario; el oponente obtenía premio cada siete intentos.

Un ritmo que se torció ante el Celta B y acabó de romperse sobre el hielo del Ruta de la Plata. Tres goles en contra después de que Abad sufriera nueve remates hacia su marco (al Zamora corresponde el récord de lo que va de campaña, con cinco). Uno a favor tras media docena de oportunidades en dirección correcta.

El relevo en el banquillo no ha devuelto al Dépor a los números del éxito. Por el contrario, tras siete choques con Rubén de la Barrera al frente, la escuadra blanquiazul ha acumulado catorce disparos a portería, traducidos en una diana. Los rivales han dejado su balance en un cinco de doce. En las áreas se ha ido esfumando el ascenso.