El entrenador del Deportivo se mostró dolido por la derrota del equipo pero razonó que era previsible que en algún momento llegase una derrota
13 dic 2020 . Actualizado a las 19:51 h.Sin paños calientes, Fernando Vázquez se mostró dolido por la derrota del Deportivo ante el Celta B. «En primer lugar, sé lo que significa, que es una derrota dolorosa. Comparto ese sentimiento, y que venga especialmente en estas fechas. Perder contra el filial de tu competidor... Sabía que alguna derrota íbamos a tener, pero no esperaba que fuera hoy», comenzaba el técnico su rueda de prensa. El de Castrofeito explicó que era previsible que llegase un revés en algún momento de la temporada, pero se mostró contrariado de que fuese precisamente el filial del conjunto vigués el que ocasionase la primera derrota del curso: « Es una derrota prevista, no fue en el mejor momento pero nos recuperaremos y seguiremos».
El Deportivo y su técnico afrontan ahora un parón hasta el próximo encuentro liguero, una pausa que deja al equipo con un «regusto» amargo. «Esto no lo vamos a olvidar. Si este partido tenía una importancia era con el regusto que deja una derrota cuando vamos a ausentarnos del terreno de juego hasta el 10 de enero», explicaba. No cree Vázquez que el equipo vaya a reencontrarse con sensaciones positivas durante la Copa del Rey, cuyas rondas previas calificó de «paripé». «Que los vasallo se peleen entre ellos. Si no caes ahora caerás en los siguientes partidos», opinaba.
Vázquez, que acabó expulsado, explicó los motivos por los que el colegiado le mostró las dos cartulinas amarillas. Contó cómo ambas tuvieron que ver con conversaciones con el juez de línea. La primera por una protesta al línier que fue transmitida al árbitro --«se chivó», dijo Vázquez-- y la segunda por una protesta, también al juez de línea, sobre cómo varios miembros del banquillo celeste estarían dando supuestas constantes indicaciones a los jugadores, algo reservado a Onésimo. «Hice un comentario que es posible que no fuese en un tono muy calmado, pero esa es la realidad», comentó Fernando Vázquez en sala de prensa.
El entrenador reconoció que el equipo salió desdibujado tras el paso por vestuarios del descanso, con demasiada ansiedad por empatar el partido y con las prisas propias de los minutos finales. «Tengo esa misma sensación y creo que también la tienen los jugadores. Creamos peligro en el primer tiempo, teníamos orden en el pase y sentido de juego colectivo, pero en el segundo con el mismo equipo, perdimos el sentido del juego. Nos sentimos presionados en exceso para atacar con claridad», analizó. «Yo estaba satisfecho del primer tiempo pese a los dos goles con el comportamiento del equipo y veía que podíamos, jugando con calma, remontar el partido, cosa que no ocurrió», se lamentó Vázquez que, pese a todo, cree que el parón puede venir bien para aprovechar a reordenar las carencias mostradas por su equipo.