El invicto Pombo marca el camino

La Voz

TORRE DE MARATHÓN

César Quian

El Deportivo busca sellar en Málaga, de forma virtual, su permanencia, guiado desde el banquillo por el ayudante de Vázquez, que no conoce la derrota en ese papel

08 jul 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

«Mañana salimos del descenso». La carrera de Manuel Pombo como primer espada en los banquillos ha sido tan breve que hasta ahora solo ha tenido tiempo de cumplir lo que prometió. Se estrenó hace siete años en el Ciutat de València sacando al Dépor de una zona roja a la que volvería a caer poco más tarde. Antes de aquel encuentro se mostró absolutamente convencido de la victoria frente al Levante, consumada a lo grande (0-4) horas después. Al estreno triunfal le sucedió un empate con invitado de honor. Duelo de estrategas Pombo-Bielsa, cerrado con empate a un tanto. Dos encuentros disputados, dos sin perder. Y así quedó el balance hasta el pasado domingo, cuando el preparador físico volvió a enfundarse el traje de faena de Fernando Vázquez para suplir a su jefe (y amigo) en Riazor. 2-1 con ramalazos del mejor fútbol en mucho tiempo y un gol perfecto en diseño y ejecución. Intocable, por destreza y azar.

Porque la trayectoria de Fernando Vázquez como director desde el palco es dilatada; el de Castrofeito goza de condición de técnico objetivo para el colectivo arbitral. Sin embargo, no siempre fue su colega quien lo suplió. Antes de que el dúo llegara al Dépor, la alternativa había recaído en Gabi Leis. Y cuando hubo otras oportunidades, ya en A Coruña, quedaron abortadas por distintos infortunios. Así, en la 2013-2014, Franganillo dirigió al equipo en Tenerife, a donde Pombo no viajó para poder cuidar de su madre enferma. Los blanquiazules cayeron con claridad.

Una relación fraternal

«Manuel y yo tenemos una relación casi de hermanos —detalla el míster—. De él valoro su conocimiento, su competencia en su apartado, en lo que me parece de lo mejor que puede tener un entrenador a su lado. El trabajo que hizo en el confinamiento y la etapa de preparación han llevado al equipo a estar perfecto en estas condiciones. Además, como elemento de ayuda debe de ser brillante. No es su primer partido en el banquillo y en su currículo no hay ninguna derrota. Ya estoy pensando en quedarme siempre arriba».

La racha llega impoluta a La Rosaleda, donde prorrogarla tendría un magnífico efecto colateral. Los coruñeses buscan en Málaga cerrar la permanencia y, consumado el milagro, poder dedicar el resto del curso (un excedente de tres partidos a disputar en diez días) a pulir canteranos y coquetear todo lo posible con el sueño de la promoción hacia Primera.

El calendario oferta la ocasión de cumplir con la gesta sobre campo amigo. En el que hace un año se derrotó al favorito del play-off para llevar la ilusión del retorno hasta Son Moix. La pelea actual está centrada en el derecho a volver a intentarlo, sin comprometer el futuro en la categoría. Málaga y Dépor comparten horas bajas, aunque el conjunto andaluz parte de una cota inferior. Por puntos (dos menos) y recursos económicos.

La simetría alcanza a la propuesta, y Fernando Vázquez alterará la suya para comprometer la rival. Probablemente, buscará mayor control del juego, dotando a Aketxe y Gaku de compañía en zona de creación. Çolak podría contar con esos minutos de los que no acaba de disponer. Para dirigirlos a todos, Pombo, la pata de conejo blanquiazul.