Luis César cambió el sistema, apostando por un trivote, y el equipo dominó, pero sigue sin ganar

Xurxo Fernández
Redactor

El Dépor ha encontrado una nueva manera de no ganar. Y tiene mérito, después de 16 jornadas variando. Para esta estrenó un interesante trivote y dominó sobrado al Alcorcón, sin hacerle daño. Longo sufrió los únicos rasguños, autolesionado. El italiano afirma ser capaz de abstraerse del entorno dentro y fuera del campo, pero sus gestos delatan el peso de cada murmullo en la grada. El punta somatiza el escepticismo hasta dejar de creer incluso en su capacidad para asuntos tan sencillos como mantener la verticalidad sobre un césped inmaculado. En la mejor ocasión que dispuso, ya cerca del descanso, perdió pie al rematar y su bota escupió directamente fuera un balón mordido.

Para entonces, el delantero ya había escuchado silbidos al intentar un pase al hueco en una contra, sin receptor disponible. No quedaba para él ni un poco de paciencia, consumida de forma coral durante quince jornadas infames. La necesidad enturbió además al colectivo en el momento de transitar. Varios pases atrás fueron recibidos con desagrado, obviando la falta de espacios propia del nuevo esquema, que protege y prioriza el carril central, aligerando las bandas.

Sin más amplitud que la facilitada por los laterales y los puntuales desplazamientos a banda de Koné y Mollejo, cada avance exigió varios desplazamientos hasta encontrar al hombre libre. Búsqueda en la que destacó especialmente Vicente, enrolado en esa posición donde dio alegrías en sus primeras tardes con Natxo. Al desempeño del canario como interior ayudó la escolta de Luis Ruiz, que lavó frente al Alcorcón la imagen de su debut en Huesca. El zurdo completó una zaga extremadamente sólida que además se permitió ciertas alegrías en ataque. Las puntuales incursiones de Somma sembraron cierto desconcierto en las líneas de presión alfareras, pero fue Mujaid quien más y mejor se incorporó al ataque.

De entre quienes ocuparon el tridente ofensivo, el más activo fue Mollejo. Las diagonales del extremo y su presión contagiosa contribuyeron a las mejores oportunidades locales en el primer acto. De un atosigamiento coordinado en campo ajeno salió un robo y un pase de Bergantiños al que Koné no llegó por centímetros. El marfileño sentó poco después a Laure en el interior del área, pero remató desviado. Como en la acción que precedió al entreacto, producto de un fenomenal envío entre líneas de Vicente. No sufrían en absoluto los coruñeses, pero tampoco metían miedo.

Nada cambió tras la pausa. El Dépor regresó al campo con los mismos bríos. A los cinco minutos, Mujaid arrancó imparable hasta superar tres marcas y alcanzar el área. Allí chutó contra el último oponente que se cruzó en su camino.

A partir de ahí bajó el ímpetu, que Luis César trató de recuperar a base de cambios. Longo se fue convirtiendo los murmullos en silbidos y Koné dijo adiós entre aplausos. Saltaron al césped Santos y Aketxe; representante el vasco de las últimas esperanzas blanquiazules, servidas a balón parado. Pero ni su fenomenal golpeo sirvió, y la reacción se quedó en una mejoría de sensaciones que no vale tres puntos.

Ficha técnica:

0-RC Deportivo: Dani Giménez; Mujaid, Lampropoulos, Somma, Luis Ruiz; Peru Nolaskoain, Álex Bergantiños, Vicente Gómez; Mollejo (Beto da Silva, m.85), Koné (Aketxe, m.73) y Longo (Longo, m.59).

0-AD Alcorcón: Ximo Miralles; Laure, David Fernández, Diéguez, Bellvís; Boateng, Dorca; Arribas (Dani Romero, m.54), Stoichkov (Aguilera, m.71), Ernesto; y Harper (Sandaza, m.82).

Árbitro: Pulido Santana, del Comité canario. Mostró amarilla a Vicente Gómez (m.9), Luis Ruiz (m.14) y Nolaskoain (m.88), del Deportivo; y a Diéguez (m.50), del Alcorcón.

Incidencias: Partido de la decimoséptima jornada de LaLiga SmartBank, disputado en el Estadio Abanca-Riazor ante 13.957 espectadores. Antes del partido, se guardó un minuto de silencio en recuerdo del exjugador del Deportivo José Luis Fidalgo Veloso, recientemente fallecido.