El reencuentro de Eneko Bóveda con su ídolo Iraola

Iván Antelo A CORUÑA

TORRE DE MARATHÓN

ANGEL MANSO

Bóveda tuvo como referente de infancia al actual entrenador del Mirandés, el mismo que le cerró las puertas para poder jugar en el Athletic hasta que este se marchó a Estados Unidos en el 2015

27 sep 2019 . Actualizado a las 07:56 h.

Era un 26 de febrero del 2009. En un partido clave por la permanencia en Primera División, que Bernardino González Vázquez resolvió con 17 amarillas, 6 rojas y 2 penaltis. Un Athletic de Bilbao-Racing de Santander con tintes dramáticos, en el que un joven de Durango, de 20 años recién cumplidos, saltó al terreno de juego de San Mamés, como primer cambio de Caparrós. Aquel chico era Eneko Bóveda.

Fue un debut fugaz. El ahora jugador deportivista disputó aquel partido de la jornada 33 de la temporada 2008-2009 y luego fue titular en la 35, contra el Betis, aprovechando la ausencia de una leyenda rojiblanca, Andoni Iraola. A esos dos partidos ligueros les siguió un tercero, la temporada posterior, pero el lateral de Durango acabaría marchándose al Eibar, ya que el actual entrenador del Mirandés le tapaba cualquier posibilidad de poder tener continuidad en el primer equipo.

Han pasada justamente 10 años, desde que Eneko Bóveda y Andoni Iraola pudieron jugar juntos por última vez (el 26 de septiembre del 2009, en un Athletic-Sevilla que acabó 0-4). Y el destino ha querido que ambos vuelvan a verse las caras este domingo (21 horas, Movistar LaLiga 1). Maestro contra alumno. Ídolo frente aprendiz. «¿Mi referente como futbolista? Me gustan muchos jugadores. Cuando estuve en el Athletic coincidí con Iraola, para mi ha sido como lateral derecho uno de los mejores», reconocía Eneko en una entrevista publicada por Plusfutbol en el 2014. «Siento admiración por Andoni y la única responsabilidad que tengo es la de superar el reto de mejorar la plantilla», confirmaba en el 2015, en su presentación como jugador del Athletic. Era su vuelta a San Mamés después de cuatro temporadas en el Eibar. Y lo hacía precisamente para suplir a un Iraola que acababa de anunciar su marcha a Estados Unidos, en donde se retiraría. «Cada año era más difícil responder a las expectativas, vestir la camiseta del Athletic es una responsabilidad muy grande», explicaba Andoni en su despedida, después de haber jugado 406 partidos de Liga con el primer equipo vizcaíno.

Bóveda regresó de ese modo a Bilbao, con la etiqueta de sustituto de Iraola, en aquel curso 2015-2016 en el que Óscar de Marcos acabaría confirmándose como el reconvertido lateral titular. Eneko iría perdiendo presencia en el Athletic poco a poco (23 partidos en la 15-16; 19 en la 16-17 y 6 en la 17-18), hasta que en enero del 2018 formalizó su incorporación al Deportivo.

Mientras Bóveda trataba de superar la losa de las comparaciones con Iraola, Andoni aprovechó para formarse como entrenador. Colgó las botas en diciembre del 2016 en el New York City de la MLS americana y en la campaña 2017-2018 debutó como técnico en el juvenil del Antiguoko, club conveniado de la Real Sociedad. En mayo del 2018 firmó por el AEK Larnaca, conjunto al que clasificó para la fase de grupos de la Liga Europa y con el que ganó la Supercopa chipriota, pero del que acabaría siendo destituido en enero del 2019. Este verano, tras la marcha de Borja Jiménez al fútbol griego, el Mirandés le dio la oportunidad de dirigir a un equipo en el fútbol profesional.

Aketxe, otro viejo conocido

Con el Mirandés, visitante este domingo de Riazor, Iraola solo ha ganado 1 partido de 7, con un fútbol vistoso, muy profundo por las bandas, que está pagando caro en defensa (14 goles encajados). Pero el reencuentro de Bóveda con su ídolo no será el único. El preparador del equipo burgalés también compartió vestuario con Aketxe. El mediapunta debutó en Primera con el Athletic en el 2014 y participó como titular en el último partido de Andoni como rojiblanco.