Solo dos de las trece veces en que el Deportivo subió de categoría se dieron en el mes de junio
22 jun 2019 . Actualizado a las 23:41 h.De entre los once fijos de Hilario, Fabeiro fue el que menos minutos tuvo para hacerse un hueco en el cuadro de honor blanquiazul. Lo logró en un plantel en el que aún resistía Chacho y destacaban futbolistas del pedigrí de Acuña, Bienzobas o Guimeráns. El 24 de marzo de 1946, Fabiano anotó su tercer gol de la temporada, el único de su equipo en el Inferniño, frente al Racing de Ferrol. Así selló el delantero de Padrón el ascenso más tempranero en la historia del Deportivo. Fue en la segunda de las trece ocasiones en las que el conjunto coruñés ha dado el salto a una categoría superior. La número catorce puede llegar hoy para ocupar el extremo opuesto de la lista: nunca había subido tan tarde el Dépor desde que empezó a competir, en 1906.
El ascenso de mayor solera, el del 41, se consumó un 4 de mayo en la prórroga de un duelo en campo neutral. Fue una promoción como la que hoy se cierra, con el Murcia como adversario y un 2-1 consumado por Guimerans. El centrocampista repetiría ascenso un lustro después. No fue el único. Hilario, el futuro técnico, había llegado desde el Barcelona para reforzar la medular, y el autor del otro tanto que derrotó a los pimentoneros fue un Chacho cinco años más joven.
De momento, y a la espera de lo que suceda en Son Móix, el acceso a Primera que más se hizo de rogar también tuvo al Murcia como coprotagonista. 9 de junio de 1991, arde la cubierta de Preferencia en Riazor. Stoja hace los dos goles de la fenomenal victoria blanquiazul. Fue el feliz desenlace a un último tramo de competición en el que los de Arsenio hilaron tres victorias seguidas para alcanzar un ascenso directo que parecía torcerse tras el empate en Palamós.
El pulso entre el Albacete, el Dépor y el Murcia de Mesones se hizo eterno hasta decidirse de forma agónica a favor de los dos primeros. Casi tanto como se estiró la pelea del 71. Los coruñeses, también entrenados por un Arsenio que debutaba en los banquillos, llegaron quintos a la última jornada. Ascendían cuatro y se medían a un Rayo que marchaba segundo y que cayó por 1-0 gracias al tanto de Beci al poco de iniciarse el choque, disputado el 6 de junio. No ha habido más ascensos en ese mes.
El Deportivo se ha plantado en Primera cuatro veces en marzo: la del Inferniño del 46; como campeón del grupo norte en 1962 y 1966; y en la de 1948, en la última jornada de un torneo de catorce equipos en la que los blanquiazules subieron pese a perder con el Valladolid (también cayeron sus rivales, Málaga y Hércules).
En abril llegaron los éxitos de 1964 ?un día 12 después de vencer 2-1 al Celta? y 1968, consumada por Morilla en el Tartiere.
Mayo ha sido el mes más prolífico. Al del 41 hay que sumarle los del 2012 (resuelto por Xisco) y el 2014 (gol de Marchena al Jaén). En 1975 y 1981 también hubo ascensos, aunque fueran desde Segunda B.