En esta tesitura, Jesús Martínez Loira compareció ayer en público para leer un comunicado en el que abogó por aprovechar las últimas horas antes de la cita de esta noche para elaborar una candidatura de unidad. Sostiene que nadie, ni él, ha conseguido un respaldo mayoritario, por lo que le gustaría la unión de todos los aspirantes y conformar un equipo. El guante no fue recogido ni por Zas ni por Vidal, que continuarán adelante en su mano a mano particular.
A diferencia de lo sucedido hace cinco años, cuando el deportivismo dio la espalda a un Lendoiro que dejaba el club en pleno proceso concursal y con una deuda de ciento sesenta millones de euros, el que gane esta noche recibirá un Deportivo ordenado económicamente. Sin embargo, tendrá que gestionar también un lastre de malas decisiones deportivas que han condenado al equipo al pozo de una Segunda División de la que le costará salir.